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Viernes, 29 de Marzo de 2024

Con acarreados y porras a EPN llenan asamblea de Sedesol

Cientos de indígenas llegaron al zócalo de Huauchinango conla esperanza de recibir una pantalla.
Domingo, 8 de Febrero de 2015 15:19

Crónica

Confianza y fe en Peña Nieto pide Sedesol en asambleaEntregan Ayuntamiento y Sedesol casi 2 mil acciones en TepeacaHuauchinango, Pue.- Algunas con la promesa de que les entregarían una pantalla “de las de Mover a México”, otras con la amenaza de ponerles falta, o de que podrían perder el apoyo de “Prospera” y “65 y Más”, fueron llegando unas 12 mil personas que se amontonaron en el Jardín Reforma, la Plaza Cívica y algunas calles aledañas de Huauchinango en el evento convocado por el subsecretario de Desarrollo Social (Sedesol), Juan Carlos Lastiri Quirós.

Presentado como un recuento de la Cruzada Nacional contra el Hambre del gobierno federal, el informe terminó siendo un mitin de cualquiera de los partidos que conforman el espectro político del país en los que no se escatiman las porras, la matraca y el confeti. Muchos especularon que fue en realidad una muestra de músculo por parte de Lastiri en su aspiración a la minigubernatura del estado de Puebla.

La capacidad del centro histórico de la cabecera quedó rebasada ante la cantidad de mujeres, hombres y niños que llegaron desde varios municipios poblados mayoritariamente por indígenas en condiciones de pobreza y marginación, pero que al mismo tiempo son territorios donde el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha sido derrotado electoralmente como Zihuateutla, Pahuatlán, Honey, Tlapacoya, Tlaola o Jopala; o ha ganado de a “panzazo” como en Naupan y Huauchinango.

Así que si caminar se volvió prácticamente imposible, ni pensar en circular en algún vehículo, pues al caos vial provocado por la concentración humana y la llegada de cientos de camiones, combis, urvans y estaquitas colmadas de pasajeros, hubo que sumar el típico y difícil tránsito de un sábado de tianguis.

Según contaron varias mujeres asistentes, esta vez el acarreo fue a medias, porque si bien los encargados de la Cruzada Nacional contra el Hambre les mandaron los transportes, ellas tuvieron que pagar sus pasajes que alcanzaron hasta los 100 pesos para quienes llegaron desde más lejos, como las señoras de Tlapacoya que madrugaron para trepar al Serrano y llegar a la plaza desde las nueve de la mañana.

Ya en el centro, una lona roji-verde que pusieron para evitar el sol o la lluvia, además de insuficiente, oscureció el templete y había casi que adivinar quiénes eran los que estaban en el presidium: los delegados Alberto Jiménez Arroyo de Corett; Vanessa Barahona de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social; Juan Manuel Vega Rayet de la Sedesol; Jorge Arroyo García de la Secretaría de Economía; Juan de Dios Bravo Jiménez de Liconsa  y la diputada federal por Huauchinango, Laura Guadalupe Vargas Vargas.

También estuvieron  los alcaldes de todos colores como el perredista Gabriel Alvarado Lorenzo de Huauchinango; el de Zihuateutla Dolores Campos Pelcastre de Movimiento Ciudadano, el de Tlaola, el panista Abdías Castillo; el de Naupan, el priista Genaro Negrete a quien le despreciaron el pan del ritual de purificación y lo dejaron dentro de sus cajas; y el presidente municipal de Honey.

Una falla más: la pésima calidad del sonido desde el que se emitieron los discursos, provocando que algunos fueran inentendibles y sólo resonaran las porras a Peña Nieto y el desesperado llamado de Jorge Arroyo a no perder la “fe y la esperanza en el presidente de la república”.

El saldo final: el pase de lista a mujeres y adultos mayores por parte de sus líderes; cinco personas desmayadas, una de ellas con síntomas de pre infarto, según los grupo de emergencia; un niño extraviado que fue localizado cinco horas después en la comunidad de Xaltepuxtla, Tlaola en circunstancias que no han sido dadas a conocer; y un zócalo colmado de basura, con plantas y flores pisoteadas.

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