Disminuyen damnificados en albergues de Huauchinango

Huauchinango, Pue.- El presunto anuncio del cierre de los albergues oficiales ubicados en el Recinto Ferial y el Instituto Tecnológico Superior de Huauchinango (ITSH) provocó incertidumbre entre los damnificados por la tormenta Earl, mientras que el alcalde Gabriel Alvarado Lorenzo aseguró que seguirán funcionando hasta que sea necesario, aunque podrían cambiar de sede al disminuir el número de personas que hay en ellos.

De acuerdo con informes de las autoridades en el primero refugio se atiende a 232 personas, mientras que en el ITSH –cuyas labores académicas fueron reanudadas este lunes- hay 51 albergados, unas mil 200 menos que en los primeros días; aunque la condición de los afectados podría prolongarse seis meses que es el tiempo que las autoridades han calculado para que se dé la reubicación.

Afectados que residían en el Camino a Cuacuila –calle Gabriel Oropeza-, indicaron que la semana pasada fue el mismo presidente municipal quien les exhortó a buscar otro sitio donde residir. “Nos dijo que debemos recuperar nuestra vida normal. Ir con familiares. Y, la verdad es que no tenemos a dónde ir porque, aunque nuestras casas no sufrieron daños, nos pidieron que las desalojáramos porque están en una zona de riesgo”.

“Yo era dueña, supuestamente, pero ya no me dejan volver a mi casa y mi familia vive en Querétaro. Cuánto voy a gastar para llegar a vivir allá también en la calle, porque su casa de mis familiares es chiquita. No tengo dónde”, dice doña Carmela.

La pérdida de doña Carmela no es única. Afecta a sus cuatro hijos y sus familias quienes vivían en un solo terreno, pero cada quien en una casita independiente y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) sólo la incluyó a ella en su censo de damnificados y eventuales beneficiarios del programa de reubicación, porque es la propietaria del lote.

“En ésta calle -tercia otra joven-, somos varios a los que nuestros papás nos dejaron vivir en su propiedad, pero nunca nos dieron escrituras, ni nos dijeron ese pedazo es tuyo. Ahora, para que nos reubiquen, necesitamos tener un papel y no hay manera de conseguirlo”.

En los albergues, dijeron, hay muchas personas que tienen una situación similar: su casa no sufrió daños, pero están en zona de riesgo y tampoco las incluyeron en el plan de reubicación. “A muchos ya les dijeron que se regresen, pero sigue lloviendo y la tierra se sigue aflojando. ¿Cómo regresamos a nuestras casas?”, se preguntan.

Hay muchos drenajes que caen en la ladera, denuncian, incluido el de una escuela privada que está en la calle Prolongación Hidalgo que formó grietas y provocó el deslave. “Cuando los drenajes de arriba se rompen, no vienen a repararlos y se quedan así varios días, semanas y hasta meses. De ahí sale toda la porquería. Les decimos, pero no nos hacen caso”.

Mantendrán albergues

Sobre los albergues, el alcalde Gabriel Alvarado señaló que hay mucha gente que tenía la creencia de que debía vivir en ellos para recibir los apoyos del FONDEN,  pero esto no es cierto, sino que basta tener el folio que entregó la Sedatu tras el censo que realizó. Al aclarar la situación, añadió, mucha gente decidió salir de ellos e irse con algún amigo o familiar, rentar o bien volver a sus viviendas.

El funcionario agregó que se comprometió con la gente alojada en los albergues a que todos serían incluidos en el programa de empleo temporal; algunos más recibirían las tarjetas para la compra de enseres domésticos y también se les exentaría del pago de cuotas escolares y de la compra de uniformes.

Lo que les dije, aclaró, “es que los programas permitirían tener una preocupación menos, pero que calculábamos que en diez días ellos estarían en su trabajo normal y que la reubicación no fuera causa de la pérdida de sus empleos. Pero los albergues estarán abiertos si la gente no tiene otras opciones”, añadió.