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Viernes, 29 de Marzo de 2024

Ni la tormenta acabó con fiesta de La Natividad en Xaltepec

“Que Dios nos perdone porque ahora no va a haber tamales”, se disculpó ante los asistentes la prima del mayordomo.
Jueves, 8 de Septiembre de 2016 13:46

Huauchinango, Pue.- Aunque la tormenta de hace un mes se llevó hasta la olla para el nixtamal, el mayordomo de  la fiesta de la Virgen de La Natividad en Xaltepec, Odilón Moreno, cumplió la encomienda de ofrecer comida a decenas de devotos que llegaron para bañarse en el manantial “milagroso” y festejar los 200 años de la llegada de la imagen religiosa a dicha comunidad.

“Que Dios nos perdone porque ahora no va a haber tamales”, se disculpó su prima, Francisca, quien anticipó a los comensales que en esta ocasión sólo se les ofrecería “un poquito de molito y tortillas compradas, porque no quedó ni un traste” y no puso nixcometl.

Aunque la misa era a las 15:00 horas, desde temprano empezaron a llegar al aljibe de aguas curativas algunos devotos de Xicotepec, de Tenango de Doria en Hidalgo, así como de la Ciudad de Mexico, para hacer sus peticiones o purificarse y limpiar los malos aires. 

Afuera del lugar les venden toallas, garrafas, cubetas y jícaras de plástico para que carguen con un poco del agua milagrosa.  

Desde temprano llegaron las bandas para cantar Las Mañanitas. También abogados, ingenieros, doctores, mujeres que llegan a pedir un buen marido, bebés llenos de ronchas que salen limpiecitos.  

Los peregrinos convocados en este año de tragedia para Xaltepec se abarrotaron en los cuartos construidos alrededor del venero donde apareció la patrona del poblado, ahí se bañaron, acicalaron y ofrecieron –en mayor cantidad que dentro de la iglesia- tributos de flores, comida, bebida y luz.  

Aquí el rito es público, convoca a la comunidad, aunque ahora, dice Francisca, hay muchos incrédulos.

“Le pedimos a la Virgen que bendiga este lugar. Que no esté triste por lo que nos sucedió. Aunque hay muchos que dicen que no existe. Pero a fuerza que sí, si no ¿por qué nacimos de nuestra madre y nuestro padre y por qué estamos aquí? Sabemos que todo lo hizo Dios, también la tormenta. Él sabe qué pecado tenemos. Sólo él”, agregó.

Venimos aquí a “buscar al dueño de todo para recordarle que aquí estamos y que no olvidamos su generosidad y paciencia. Aunque a veces, nosotros no sabemos respetar lo que nos da”, recalcó al mismo tiempo en que dijo que las mujeres también tienen fe en que La Natividad hizo que el agua brotara del vientre de la madre tierra y que llegar aquí, después del desastre, les dará fuerza para enfrentar la vida.

Don Pedro, habitante del lugar, contó que esperaron a miles de peregrinos, aunque sea de entrada por salida, porque ahora muchos tienen miedo de ir por los deslaves. 

Funcionario municipal intentó ahuyentar a periodistas

Cuando representantes de este medio de comunicación tomaban fotografías en la Iglesia de Xaltepec, Hilario Moreno Cruz, funcionario de la Dirección de Atención a Comunidades del ayuntamiento y ex alcalde de la comunidad, impidió su trabajo.

A empujones los sacó del recinto y amenazó con arrebatarles la cámara fotográfica, exigiendo que salieran: “aquí no es Huauchinango, aquí es Xaltepec y no pueden estar tomando fotografías o les voy a echar a la gente”, gritó.

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