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Martes, 19 de Marzo de 2024

Noé, el peregrino que visitó a la Guadalupana y no regresó

El menor de 13 años de edad fue una de las 12 personas que murieron en un choque ocurrido en la autopista México-Puebla.
Miércoles, 13 de Diciembre de 2017 19:05

Huejotzingo, Pue.- La madrugada del martes 12 de diciembre, los sueños de Noé Sánchez, uno de los 12 peregrinos que murieron durante un choque en la autopista México-Puebla, terminaron abruptamente. Él quería crecer y ser chofer de un autobús o ingeniero en electrónica.

El pequeño de 13 años de edad, estudiante de Telesecundaria, es  el hijo mayor de Pablo Sánchez, quién lo recuerda como buen hijo y estudiante, además por su gran deseo de conocer la “casa de la madre de Dios”, como se refería a la Basílica de Guadalupe.

El padre del menor, cuyo cuerpo arribó a Nepopulaco en Huejotzingo, la madrugada de este miércoles, mencionó que era la primera vez que sus hijos Noé y Antonio -quién se encuentra internado en el Hospital del Niño Poblano- formaban parte de una peregrinación a la que asistieron emocionados y de la que solo uno regresó.

Apuntó que la última vez que vio con vida a Noé fue la madrugada del domingo, cuando lo acompañó a la iglesia de Nepopulaco de donde salió la peregrinación hacia el Señor de Tepalcingo y la Basílica de Guadalupe.

Noé tenía grandes sueños y por eso se esforzaba en los estudios, ya que de grande quería manejar un autobús o ser ingeniero en electrónica, expresó su papá.

Pese al dolor, agregó, ahora solo espera que Antonio, su otro hijo, se recupere de las lesiones que sufrió en el accidente de la autopista México-Puebla.

Pablo Sánchez refirió que el pueblo de Nepopualco se ha volcado solidario y ha pedido que todos los cuerpos sean velados en la iglesia de la comunidad, aquella de la que gustosos y emocionados partieron la madrugada del 10 de diciembre.

Mientras cruza las manos mira hacia la habitación donde está el féretro blanco de Noé, envuelto en una sábana, rodeado de algunas veladoras y la imagen de la Virgen de Guadalupe que cargó en su espalda, en ese viaje del que no regresó.

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