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Viernes, 19 de Abril de 2024

Celebran en grande los municipios poblanos a la Virgen del Carmen

Este año se cumplen 114 años de dicha celebración que congrega a miles de fieles que visitan a la imagen traída desde España
Martes, 16 de Julio de 2019 16:04
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Corresponsales

Puebla, Pue.- En el estado celebramos cada 16 de julio, desde 1856 a la Virgen del Carmen, haciéndola una de nuestras festividades más antiguas e importantes.

Olvídate de la dieta y deleitate en la Feria de la CemitaTodo listo para la temporada de chile en nogada 2019Este día, decenas de poblanos se reunieron para la celebración religiosa, la cual estuvo llena de fiesta, música, mariachi y miles de fieles que acuden en peregrinación al templo para agradecer o pedir milagros.

Cabe señalar que, en la ceremonia, los peregrinos que llegan desde distintos puntos del país, quienes hacen fila en el atrio de la iglesia para deslizarse bajo del "manto de la virgen.

En San Martín Texmelucan

Fieles católicos celebraron este 16 de julio a la Virgen del Carmen en la villa del mismo nombre que se ubica en la colonia Morelos.

Los organizadores explicaron que la tradición de los festejos comenzó en 1905, cuando fue construida la iglesia que se ubica a un costado de la fábrica textil San Martín o del Carmen, como se le conoce popularmente.

La escultura de la Virgen llegó desde España y se encuentra en el altar principal de la capilla, donde es venerada por la feligresía.

Los organizadores comentaron que este año se cumplen 114 años de dicha celebración que congrega a miles de fieles que visitan a la imagen ya sea para agradecerle algún milagro o para ofrecerle flores en señal de gratitud, además de llevarse reliquias como los escapularios.

El dato histórico

Jesús Contreras, cronista oficial de Texmelucan, señaló que el barrio o Villa, hoy  colonia “El Carmen” se debe gracias al surgimiento de la Fábrica Textil “San Martín” fundada en 1897.

De entre las fábricas que se instalaron en Texmelucan a finales del siglo XIX, esta fábrica de mantas e hilados, fue la única que creó una Villa Fabril; este nuevo centro de población o calpanería se componían de cuartos que se les daban a los trabajadores para retener la mano de obra, más que para el beneficio del trabajador, era para el beneficio del patrón, ya que sus obreros estarían siempre a la mano.

Tanto los patrones como el posterior sindicato “Regeneración” y luego llamado “Mártires del 7 de Enero” procuraron dotar al obrero de lo necesario para reproducir una vida apegada a la fábrica; de esa manera la colonia o barrio tiene algunos edificios representativos como la capilla, la escuela primaria y luego secundaria, la calpanería, la huerta, los lavaderos, las fuentes, las canchas, el cine teatro y el sindicato.

Jesús Contreras señaló que hasta  antes de 1960 la colonia estaba separada de la ciudad, al grado de que un “circuito” o camión de pasajeros cubría la distancia.

 La factoría tenía acceso a las vías del ferrocarril interoceánico y un pequeño tren tirado por mulas conectaba la estación con los telares, surtiéndolo del algodón y lino que traían del norte del país; el agua para la producción se tomaba del río Atoyac, mientras que el agua potable para los habitantes era suministrada por el Ayuntamiento a través de una fuente pública.

Los callejones empedrados y las leyendas de la colonia son narrados por Serafín Sodi en el libro que todos conocen como “Tú ya no soplas”.

De los edificios emblemáticos destacan el Castillo o tienda de la Cooperativa, el edificio del Cine Teatro Colonial, hoy llamado Teatro “Pardo Infante”, el salón de baile y los puentes de arco de medio punto que están sobre el cárcamo y río.

En los años ochenta, el complejo del sindicato sirvió de sede para la Escuela Secundaria Federal 2 y luego para los eventos de la feria regional cuando en los noventas se puso el Centro Expositor hoy transformado en la unidad Deportiva ángeles Blancos. En las oficinas existen murales paisajistas del Maestro Enrique Benítez.

El día 16 de Julio se celebra a la Virgen de “El Carmen” y esta es sin lugar a dudas una de las festividades más concurridas de la ciudad, llena de colorido, antojitos mexicanos y demás aspectos que le dan un toque especial.

La imagen de la Virgen del Carmen, una de las más hermosas en su estructura, hecha de madera e importada de España por la esposa del señor Matienzo, es imán de religiosidad y amor para los fieles que la visitan llueva o truene. 

De acuerdo a los datos históricos, el festejo en honor a la virgen no siempre se realizó como hasta ahora, ya que en los 40 era muy pequeña y solo se adornaba la capilla con diferentes arreglos de flores, había cohetes pero no como se hace ahora, algunos puestos de pan y algunos juegos mecánicos.

También se hacían las peregrinaciones aunque solamente hasta el empedrado y de regreso.

Además recordó que la capilla, obra fue iniciada en 1903 y se terminó en el de 1910, siendo administrador de la fábrica el señor Valentín Fuentes.

En Atlixco

En este municipio la virgen del Carmen parece olvidada en su día, en su festejo, en la colonia que lleva su nombre. Los hijos y los nietos de los ex- obreros encargados de celebrarla ya no están. O ya se murieron o cambiaron de residencia.

Y las nuevas generaciones, dice Antonio Pacheco, el viejo de la chirimía, no desprecian la fiesta: no se sienten identificados con esta tradición. “Y de plano ya no vienen”, lamentó.

La colonia El Carmen en esta ciudad es una de las marcadas por la herencia de la época textil de hace siglo y medio: una fábrica, un sindicato convertido en casa de cultura, una primaria y pocos, escasos rastros de familias unidas a esa parte de la historia.

La tarde de este martes en el aniversario de la señora del Carmen, impuesta en ese lugar por orden de un ex líder obrero, apenas pocos llegan a la pequeña capilla donde suena la música de tambora... donde sobra espacio en las bancas blancas de la iglesia y donde el ánimo es inerte.

Ya mejor los lugareños están apartando lugar en los alrededores de ese pequeño y aparentemente inseguro rodeo de toros. Son las 16 horas y ya varias familias no se mueven de las gradas. Y eso que el show comienza a las 19 horas.

El Carmen de Atlixco huele a fritanga de cemitas, tacos y chalupas. A pasto lleno de cerveza regada. Mientras, la mujer de vestido blanco sigue esperando la visiten para recordar por años cuidó a sus antepasados.

Fotos especiales

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