Huauchinango, Pue.- Más de 130 comunidades de Puebla, Hidalgo y Veracruz serán afectadas por la construcción del gasoducto Tuxpan-Tula que transportará 886 millones de pies cúbicos de gas diarios desde el sur de Texas hasta el altiplano central del país, y que será construido por una filial de la empresa Transcanada para la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
De acuerdo con Octavio Rosas Landa, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la tubería de 36 pulgadas de diámetro que empezará a operar en diciembre de 2017, atravesará tres municipios veracruzanos, siete poblanos y 13 hidalguenses en los que hay más de 130 centros de población de diversos tamaños.
Rosas Landa advirtió que el trazo de 263 kilómetros de longitud está proyectado en la zona fronteriza de los tres estados de manera “deliberada” para “evadir la responsabilidad a nivel local”, sobre todo cuando se genera resistencia social: “unas y otras autoridades se echan la bolita y ninguna responde a la inconformidad”.
En la región, la construcción de este gasoducto se sumará a la del Tuxpan-Atotonilco de la empresa Gasomex y a la del Poliducto para el transporte de gasolinas, diésel y turbosina del sistema Golfo-Centro Tuxpan-Arco Norte-Tula que realiza la estadunidense PMI Norteamérica, y está contemplado en el Plan Quinquenal de Gasoductos dado a conocer por el gobierno federal en octubre pasado.
De acuerdo con una proyección realizada por el investigador, los municipios poblanos por los que cruzará la tubería que será instalada por “Transportadora de Gas Natural de la Huasteca”, nombre con el que se “disfrazó” Transcanada, son: Venustiano Carranza, Francisco Z. Mena, Jalpan, Tlaxco, Tlacuilotepec, Pahuatlán y Honey.
El investigador estimó que los habitantes de los municipios involucrados en el proyecto estarían en riesgo constante por diversos factores que van desde la colocación misma de la tubería expuesta a ruptura, la corrosión por la salinidad de los suelos y los yacimientos de agua del subsuelo y, el de una eventual explosión.
Lo peor dijo es que no hay un control de riesgos por parte del gobierno y aseguró que en los primeros 600 días de gobierno de Enrique Peña Nieto se registraron mil 100 emergencias ambientales “dos por día”, de las que solamente puede atender 10 al año.
Pero además alertó que en esta obra se aplicará la figura legal de “servidumbre temporal de hidrocarburos”, lo que significa que no se expropiará a los propietarios de los terrenos afectados, pero el problema será que no podrán disponer de ellos.
El gasoducto Tuxpan-Tula que abastecerá a la Comisión Federal de Electricidad, se conectará posteriormente con la línea submarina Texas-Tuxpan, otro proyecto en el que se ha calculado se invertirán 3 mil 100 millones de dólares y que tendrá una longitud de 800 kilómetros.
En octubre pasado, la Secretaría de Energía (Sener) anunció que se construirán 12 gasoductos de gas natural y una estación compresora conforme al Plan Quinquenal que contempla inversiones combinadas de más de 10 mil millones de dólares.