Huauchinango, Pue.- Será en predios propiedad de los damnificados por la tormenta tropical Earl de Xaltepec en Huauchinango, que este miércoles iniciará la construcción de las primeras cinco viviendas, de un lote de 100 comprendidas en la primera etapa de aplicación de los recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (FONDEN) del gobierno federal.
Lo anterior fue informado por el alcalde Gabriel Alvarado Lorenzo, quien aseguró que su gobierno no ha participado en la definición de la estrategia para la reconstrucción de las casas de las familias afectadas por el fenómeno que azotó la región en agosto pasado y son únicamente funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y de la Secretaría de Desarrollo Social del estado (Sedeso) quienes determinaron las reglas y manejarán esos recursos.
Alvarado Lorenzo detalló que esta misma situación, la de construir en terrenos de los propios damnificados, se aplicará a 19 familias de la comunidad de Cuacuila y el resto de las acciones se harán en diversas colonias populares de la cabecera municipal, a pesar de que su administración cuenta con los terrenos adecuados para la edificación de las más de 450 viviendas necesarias.
Indicó que hasta este momento sólo ha recibido información al respecto de manera extraoficial y al parecer fue la “complejidad de los suelos de la región” la que llevó a autoridades de la federación y el estado a rediseñar la estrategia, pero “no se nos han dado a conocer los mecanismos para la reubicación de las viviendas de personas afectadas”.
Indicó que tanto la Sedatu, como la Sedeso hicieron una revisión de los padrones de beneficiarios con la reubicación y dejaron fuera a las familias que habitan en zonas federales de riesgo –como las orillas de los ríos- que en un principio habían sido considerados “pero sólo lo sabemos extraoficialmente”, recalcó.
“Desconocemos si las personas que habitan en zonas de riesgo seguirán ahí. Nosotros ofrecimos predios con condiciones para la reubicación y ahí están, pero los fondos los manejan ellos y ellos determinarán cómo los aplican. Quizá –aventuró el edil- nos consulten para decidir en conjunto qué hacer”.
Afirmó que tampoco conoce cuánto se invertirá en la construcción de cada casa que se hará en terrenos de los afectados por la tormenta tropical Earl, aunque en principio se habló de que se aplicarían “mil millones de pesos”, además dijo saber que a los beneficiarios se les dotará de algunos enseres “como colchones y utensilios domésticos que les faciliten vivir en estos lugares”.
Explicó que tras un primer acercamiento con damnificados que habitan en las comunidades indígenas, los funcionarios federales y estatales, se percataron de que la gente se iba a negar a abandonar su lugar de origen y sus usos y costumbres. “No quieren estar fuera de su población”.
Y reiteró que el municipio “no tiene injerencia” en la reconstrucción ni le reubicación de las viviendas.