Puebla, Pue.- La noche previa al asesinato de la estudiante de Psicología de la BUAP, Ingrid Aremis Guevara Aguirre, convivió con su ex novio Ricardo Iker, quien presuntamente la asesinó en el departamento de su amiga Giovana, a donde la víctima lo dejó entrar porque él le dijo que tenía frío y terminó por matarla.
Este 3 de junio, cuando Ingrid cumpliría 21 años de edad, se llevó a cabo la audiencia de Ricardo Iker, presunto responsable de asesinar el pasado 12 de mayo a la universitaria originaria de Veracruz en el fraccionamiento Allegro de San Andrés Cholula.
La audiencia se llevó a cabo, luego de que el domingo pasado, alrededor de las 14:00 horas, Ricardo Iker de 35 años de edad se entregó a las autoridades en el hotel Aristos, de la avenida Reforma y calle 7 Sur.
Se conocieron en Capital Night Club
Giovana e Ingrid trabajaban en relaciones públicas, en el antro "Capital Night Club" de San Andrés Cholula. Fue en agosto del 2018 donde conoció a Ricardo Iker, quien era cadenero del lugar y se hicieron novios. Sin embargo, a principios de este año terminaron su relación. Fechas en las que el acusado viajó a Europa y dejó de trabajar en el lugar referido.
Tras la ruptura, Iker hostigó a Ingrid, quien lo bloqueó en sus redes sociales e incluso se vio obligada a cambiar su número celular, cuando la chantajeó y agredió verbalmente.
Ante el acoso, el 19 de marzo del año en curso, Ingrid denunció por violencia a Iker ante la Unidad de Atención Especial de Violencia Familiar y Violencia de Género, la cual quedó asentada en el expediente 1397/2019/UVFYDG.
Tras una valoración psicológica y la mediación, Ingrid aceptó mantener una relación de amistad con Iker, debido a que ambos tenían amistades en común y en esa ocasión, no hubo violencia física de por medio.
Coinciden en “El Costeñito”
Transcurrieron los meses y el 11 de mayo, Ingrid e Iker coincidieron en el restaurante "El Costeñito", y junto con otros dos amigos, narró Giovana, recorrieron bares en San Andrés Cholula y terminaron en Capital Night Club, donde una vez más tuvieron una pelea e Ingrid fue asistida por sus compañeros de trabajo, debido a que alcoholizado, Iker la jaloneó.
El personal de seguridad sacó al presunto feminicida e Ingrid y sus amigos continuaron la fiesta hasta las seis de la mañana. Al salir pasaron a comer tacos y cuando Ingrid ingresó al fraccionamiento Allegro, observó que Iker estaba recargado en el carro de Giovana, dueña de la casa donde la víctima se quedaba los fines de semana.
Lo dejó entrar porque hacía frío
De acuerdo con cámaras de seguridad, Iker se saltó la barda y en estado de ebriedad, esperó a que Ingrid llegara.
Justo ese día, 12 de mayo, explicó el agente ministerial, Giovana no se encontraba en su domicilio porque había salido con otros amigos.
Al llegar, Ingrid logró sacar una fotografía a Iker que envió a Giovana, quien le pidió no permitirle el ingreso a la casa. Sin embargo, la universitaria le respondió que no podría hacerlo porque hacía frío.
Giovana se mantuvo en llamada telefónica con Ingrid por 14 minutos, mientras Iker entraba a la casa y según la víctima, se había quedado dormido en el sillón.
Horas más tarde, a las 10:58 horas, él salió de la casa.
Ese mismo día, Mariana, otra de las amigas de Giovana que vivía en el inmueble –Ingrid tenía su domicilio en San Manuel, sólo se quedaba ahí los fines de semana-, encontró sin vida a Ingrid. Cuando llegó de la Ciudad de México a la casa, pensó que su amiga estaba dormida porque estaba tapada con una cobija, ella se metió a bañar. Más tarde, ante la falta de reacción de Ingrid, solicitó auxilio.
El presunto responsable forcejeó con la veracruzana y la golpeó, generándole 26 moretones en boca, mentón, brazo y piernas. Al final, según la autopsia, la asfixió según la necropsia.
Previo al asesinato, el último mensaje que Ingrid envió a su madre, luego de que le comentara sobre el depósito que le había hecho su papá fue: “Gracias mami”.
clh