En 1990 el expresidente Carlos Salinas de Gortari, privatizo la empresa TELMEX dando pie a la formación de la fortuna más grande de México en torno a Carlos Slim.
Hoy en día Telmex no genera gran productividad, se ha reducido a la administración de las ya poco utilizadas líneas telefónicas fijas, los ingresos fijos de esta compañía estan muy por debajo de ls redes de telefonía celular que también controla Carlos Slim. Además, sus servicios adicionales, como la navegación en internet y manejo de fibra óptica fueron descentralizados a otras compañías.
Una de las mayores problematicas de esta empresa, además de sus pocas ganancias,es que en la actualidad ya tiene más trabajadores jubilados que activos, lo que impide dar rentabilidad a la empresa. Ante esta situación, se piensa que para el próximo año la compañía Telmex se podría declarar en quiebra, para trasladarse a otra empresa.
El miedo y desconcierto ante el posible quiebre de Teléfonos de México, ha provocado que ante la renovación de la dirigencia del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, pueda existir la reeleción del ahora secretario general de Marco Antonio Luna. Además de la salida de Francisco Hernández Juárez, el actual dirigente gremial a nivel nacional.
Se sabe también que el dirigente, se ha topado contra la 4T y todo indica, que estarían contados sus días. Se han presentado 10 denuncias ante la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público contra familiares de Hernández Juárez, que tendrían problemas para demostrar sus ingresos económicos.
Se dice que Hernández Juárez, para evitar pisar la carcel, estaría negociando dejar el poder al estilo de Carlos Romero Deschamps, quien cedió el control del Sindicato Petrolero de la República Mexicana por renuncia voluntaria. Además de retirarse previo al quiebre de la empresa y evitar los conflictos sobre el futuro de los trabajadores.
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