“Estoy tan avergonzado de haber sido parte de esto, muy, muy avergonzado”, dijo el acusado Robert Scott Palmer, originario de Florida, ante una corte federal del Distrito de Columbia.
Palmer, que fue arrestado en marzo pasado y se declaró culpable de un cargo de agresión a los agentes, pidió una condena de no más de dos años de prisión, lo que fue rechazado por la jueza Tanya Chutkan.
En su declaración de culpabilidad, Palmer admitió haber lanzado una plancha de madera contra agentes de la Policía Metropolitana y del Capitolio. También reconoció haber utilizado un extintor contra los efectivos del orden hasta dejarlo vacío, antes de lanzar el objeto contra ellos.
La Fiscalía había solicitado a la jueza una sentencia para Palmer de 5 años y tres meses de prisión, la mayor pedida hasta ahora contra un sospechoso del asalto al Capitolio.
Sus abogados defensores han sostenido que su cliente sufrió depresión y consumió drogas en el pasado, además de haber sido sometido a abusos durante su infancia, lo que pudo haber contribuido a su actuación del 6 de enero.
Los fiscales federales han imputado a más de 600 personas hasta el momento en más de 40 estados por su presunta implicación en el asalto, donde cinco personas fallecieron, una de ellas un policía.
Fotografía: el periódico
pot