Mexicanas protestaron este domingo frente al Palacio Nacional para exigir al Gobierno que acabe con la impunidad ante la ola de agresiones contra las mujeres.
La manifestación se dio dentro de la conmemoración del octavo aniversario del ataque contra Carmen Sánchez, cuya cara quedó desfigurada por Efrén, su expareja, en uno de los tantos casos de violencia contra las mujeres a nivel nacional.
La protesta tiene como objetivo ayudar a crear conciencia sobre estas agresiones.
Recordemos que el agresor está vinculado a proceso por feminicidio en grado de tentativa y en espera de una sentencia ejemplar que siente un precedente de no repetición.
“Hoy queremos que se inicie la lucha por la erradicación de la violencia con ácido, para ello debemos comprenderlo como lo que es: una tentativa de feminicidio”, exclamó Martha Ávila, una de las voceras de la Fundación Carmen Sánchez MX, creada tras el caso.
Las mujeres leyeron un escrito frente al Palacio Nacional, lugar, donde exigieron, al gobierno federal, que acabe con la impunidad ante la ola de agresiones contra las mujeres.
Aseguraron que el caso de Carmen “no es el único en este país y al menos 31 mujeres más han sido víctimas de ataques con ácido en las últimas dos décadas: seis de ellas no lograron sobrevivir y las otras 26 están en espera de verdad, justicia y reparación integral del daño”.
México padece una ola de violencia con mil 4 feminicidios registrados en 2021, asesinatos tipificados por razones de género, un 2.66 por ciento más que en 2020.
Al sumar los asesinatos clasificados como homicidios dolosos, en México matan a más de 10 mujeres al día, según cifras oficiales.
En los muros del recinto, la fundación Carmen Sánchez MX proyectó diversos mensajes como: “32 víctimas mujeres. 94 por ciento de impunidad”, “Justicia, reparación del daño” y los nombres de algunas afectadas.
Además, afirmaron que con esta protesta pretenden evidenciar el aumento significativo del número de casos de ataques con ácido hacia mujeres mexicanas, así como las secuelas físicas, emocionales, psicosociales y económicas que dejan este tipo de crímenes en la vida de las mujeres.
Foto: Archivo-e
LSM