El gobierno de Rafael Moreno Valle adquirió a sobrecosto un equipo para hemodiálisis destinado el Hospital para el Niño Poblano (HNP), sin embargo una vez que se instaló se detectó que no era compatible, reveló el secretario de Salud, José Antonio Martínez García.
Así lo expuso durante la inauguración de la Unidad de Hemodiálisis para atender pacientes con Enfermedad Renal Crónica del HNP, que se conjunta con una similar en el Hospital General del Norte.
Al intervenir en el evento, el funcionario de Salud narró lo que calificó como “una historia de corrupción y de terror que se vivió en este hospital”, en el año 2014.
“Mercenarios de la Salud, que tanto daño le han hecho a este queridísimo hospital, realizaron una inversión millonaria para tener una unidad de hemodiálisis, comprando máquinas a sobrecosto. Pusieron un equipo de ósmosis inversa carísimo y resultó que no eran compatibles las máquinas y la ósmosis inversa con los equipos que adquirieron y las líneas de transferencia, por lo que se quedó en un cascarón millonario”.
Sobre este caso, el gobernador Miguel Barbosa Huerta señaló que se abrirá una investigación por este caso.
Martínez García destacó que en todo el estado hay 7 mil 500 pacientes de todas las edades que padecen males renales y de ellos 1 mil 400 requieren de terapia sustitutiva, en tanto que 10 por ciento son menores de 17 años.
Ellos gastan anualmente 180 mil pesos en promedio para su atención médica, lo cual “es catastrófico para familias que viven al día, gastan ahorros y pierden su patrimonio”.
Señaló que hasta ahora no se había apoyado a pacientes con este padecimiento, por lo que ahora se hace justicia en salud y se disminuye la brecha en desigualdad.
Cabe señalar que la administración estatal planea llegar a seis unidades de este tipo en todo el estado.
Foto: especial
gse