Viernes, 20 de Enero de 2023 06:26 | Municipios Puebla

La SCJN, la virginidad de la virgen y la preexistencia en los seguros de gastos médicos

Un tema que ojalá algún día vea la corte suprema es de las reglas de las enfermedades preexistentes, ya que francamente discriminan a la gente que más protección necesita: la que está enferma

Muy interesante artículo de Sergio Sarmiento hoy jueves 19 de enero en Reforma. “Salud como en Suiza”, se titula. Narra un accidente que tuvo mientras participaba, como periodista, en el Foro Económico Mundial de Davos. Resbaló en el hielo y tuvo que ser trasladado en ambulancia a un hospital. Esto le dio “una oportunidad inesperada: conocer de primera mano el sistema de salud de Suiza”.

Sarmiento compara el sistema de salud suizo con el de Dinamarca, este último el ideal para México del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Como dice el columnista de Reforma y conductor del principal noticiero de El Heraldo Radio, “Dinamarca tiene uno de los mejores sistemas de salud del mundo, aunque el de Suiza es tan bueno o mejor”.

El sistema suizo es ejemplar, ni duda cabe. Y es privado, absolutamente privado. Puede, entonces, servir de guía para mejorar parte del sistema mexicano: el de los hospitales privados.

Entendamos las cosas más allá de fanatismos de izquierda que estorban en el análisis:

El abuso de las compañías aseguradoras

En México el sistema funciona a medias porque las aseguradoras abusan. Abunda la gente poco ética entre sus propietarios y directivos.

Uno de los grandes abusos de las aseguradoras —no el único— tiene que ver con la preexistencia. Es decir, si alguien tiene una enfermedad ya no se le asegura. Nunca, jamás. ¿Y si enferma de otra cosa? Tendrá que pagar su atención o costarle al Estado, que no puede con tanto.

¿Cómo son las cosas en Suiza?

Sergio Sarmiento da un buen resumen:

Lo relevante es que, en Suiza, el seguro de gastos médicos básico las aseguradoras tienen la obligación de ofrecerlo “sin importar el estado de salud de la persona, lo cual evita el rechazo a quienes representan riesgos altos”.

En México esa es una utopía, ya que si hay enfermedades preexistentes, ¡¡¡no hay seguro!!!

Se trata de un gran abuso porque las compañías de seguros ganan mucho dinero. En Suiza parten del principio de que la mayoría de quienes compran un seguro no se enferman —es la verdad, allá y en México—, entonces quienes pagan una póliza y viven sanos apoyan a quienes sufren un malestar.

En México deberían corregir tal situación:

Las cámaras legislativas están en falta: nada han hecho, seguramente porque se dejan enredar por los gestores de las aseguradoras.

La Comisión Nacional de Seguros y Fianzas sí hace la tarea, pero necesita más reglas para apretar a empresas tan poco éticas.

La SCJN, en su primera sala, ha cumplido ya en varios casos que le ha tocado ver. Claro está, debe hacer mucho más y llevar al pleno de la corte proyectos de sentencias contra las aseguradoras para obligarlas a que le bajen a sus ganancias y le suban a su moralidad.

Un tema que ojalá algún día vea la corte suprema es de las reglas de las enfermedades preexistentes, ya que francamente discriminan a la gente que más protección necesita: la que está enferma.

Ojalá alguien obligue a las aseguradoras a dejar de ver la preexistencia como un dogma tan inatacable como el de la virginidad de la virgen.

Columna de Federico Arreola en SDP Noticias

Foto SDP

clh