México.- Frente a frente estaban los dos mejores equipos de la Champions League, Real Madrid y Manchester City, aunque fue un partido disputado, terminaron empatados a un gol en el juego de ida de las semifinales.
El estadio Bernabéu fue el escenario de dicho, donde el cuadro inglés fue ligero dominador del duelo, ambos clubes se guardaron para definir la serie en el encuentro de vuelta y así definir a uno de los finalistas de la Champions.
El City apostó en este juego de ida por la posesión de balón, a jugar con Grealish y Bernardo Silva desenvolviéndose por las bandas mientras Erling Haaland esperaba su oportunidad para seguir celebrando goles.
El primer gol del partido llegó a los 36 minutos tras una jugada que inició Camavinga, quien se lució gran parte del juego con sus recorridos de 50-20 metros. El punto es que de sus pies nació el pase final para Vinicius que lanzó un potente disparo el 1-0. Con la ventaja en el marcador, las marcas se cerraron aún más para los Citizens.
Pero el mérito del conjunto inglés fue la paciencia y su apego al plan de partido con el control del balón en espera de una jugada de gol. Así llegaron dos jugadas importantes y las dos fueron con un disparo de Kevin de Bruyne. El belga tuvo un mano a mano que desvió Courtois (por cierto, hasta le dolió la mano de la fuerza del tiro). La segunda fue el gol con un disparo desde afuera del área que fue imposible de detener.
De esta manera, la moneda está en el aire para el cotejo de vuelta de la semifinal de la Champions League el 17 de mayo en el Etihad Stadium, donde todo sigue en el aire entre dos titanes del futbol actual.
Foto @realmadrid
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