Al menos 1.45 millones de niños y adolescentes viven en situación de pobreza moderada o extrema en el estado de Puebla, cifra que casi iguala a la población total de la ciudad capital, que era de 1.6 millones de personas en 2020.
Así lo establece el informe “Pobreza infantil y adolescente en México 2020”, elaborado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En los primeros lugares destacan Veracruz con 1.61 millones, Chiapas con 1.63, Estado de México con 2.79 y Puebla con 1.45 millones de personas de 0 a 17 años en situación de pobreza moderada o extrema.
Unicef y Coneval destacan que en Baja California Sur, Colima y Nayarit se reportan menos de 100 mil menores de 18 años en condición de pobreza.
Contrario a Chiapas, Estado de México, Jalisco, Puebla y Veracruz, que son las entidades donde más de un millón de menores se ubica en esta categoría.
En porcentaje de población Puebla sube un lugar
Al observar el porcentaje de personas de 0 a 17 años en situación de pobreza moderada o extrema en México, Chiapas está al frente con el 82.7 por ciento, Guerrero queda en segundo sitio con 74.6 y Puebla en tercero con 69.9 por ciento, una proporción de siete de cada 10.
Los organismos señalaron que históricamente la infancia y adolescencia ha sido uno de los grupos más afectados por la pobreza, sin embargo, la pandemia de COVID-19 profundizó su afectación.
También cabe resaltar que dentro de la infancia y la adolescencia existen grupos específicos con mayores desventajas, como los pertenecientes a grupos étnicos.
Además, si bien existen programas de protección social para algunos grupos de la infancia y la adolescencia, como es el caso de los estudiantes, es importante que estos programas amplíen su cobertura actual y se extiendan para cubrir toda la infancia comenzando por los más pequeños en primera infancia y priorizando a aquellos que pertenecen a un grupo étnico.
“Lo anterior se puede lograr a través de un conjunto de acciones integrales y articuladas que combinen las transferencias monetarias no condicionadas enfocadas a este grupo etario, los programas y servicios complementarios de alimentación y de cuidado infantil, especialmente para aquellos sin acceso a la seguridad social”, se indicó.
Foto: archivo m
gse