La jueza Angélica Sánchez fue aprehendida en la Ciudad de México por segunda ocasión, apenas una semana después de haber sido liberada de una primera detención en Veracruz.
La hija de la jueza, Ingrid Gómez Sánchez, declaró que autoridades sin identificar llevaron cabo el aseguramiento en el hotel Fiesta Inn, en el Centro Histórico capitalino, donde una mujer las alcanzó.
“(Nos dice) Que van a llevar a cabo una diligencia. Nos alarmamos, tratamos de meter a mi mamá a un elevador. La jalonean. Como podemos la metemos al elevador del hotel y en ese momento dice que se va a llevar a cabo una detención en su contra por delitos contra la fe pública y tráfico de influencias. Así lo manejaron”, detalló en entrevista.
“No sabemos si la carpeta de investigación está aquí (CDMX), está en Veracruz. No sabemos nada. La orden de aprehensión jamás nos la enseñaron. (…) No leyeron sus derechos. No sabíamos quiénes eran”.
Debido a sus antecedentes, la jueza veracruzana contaba con un amparo el cual mostró al momento de su detención en CDMX. No obstante, las personas que la privaron de su libertad afirmaron que el documento “no servía” y — ante la resistencia de la familia — la sustrajeron con lujo de violencia para llevársela en una camioneta tipo Mitsubishi con placas del Estado de México (Edomex) con placas PED2984.
La jueza fue trasladada a la Unidad Antisecuestros de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) y de ahí será llevada a Veracruz.
Aunque la Fiscalía General de la República (FGR), así como la capitalina, descartaron participar en la detención, en el Registro Nacional de Detenciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) señala que habrían sido elementos de la Guardia Nacional (GN) los que privaron de la libertad a la Jueza Sánchez Hernández. Hasta el momento la dependencia no ha confirmado o negado la información.
La jueza ya había sido detenida el 6 de junio por elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz por supuestamente ordenar la libertad de Itiel “N”, alias “El Compa Playa”, señalado por ser generador de violencia en esa región.
Dicho actuar fue condenado por el gobernador Cuitláhuac García quien, sin precisar los delitos imputados, dejó entrever que estaría relacionada con casos de corrupción.
Durante la primera aprehensión, su familia acusó de que se dio de forma arbitraria y que incluso habrían hecho que usara un arma de fuego para imputarle más cargos en su contra. En ese momento, la Asociación Mexicana de Juzgadoras emitió un comunicado en el que pidieron parar la violencia institucional.
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