México.- En un hecho insólito y por primera vez en la historia, la NASA logró este domingo traer a la Tierra una muestra de un asteroide, que los científicos esperan proporcione información única sobre el origen de la vida y sobre la formación del sistema solar hace unos 4,500 millones de años.
Es así que la NASA recuperó este domingo una cápsula con muestras recogidas en un asteroide que servirá a los científicos para estudiar a la formación del Sistema Solar y los componentes fundamentales para la vida.
Una cápsula espacial de la NASA que transportaba la mayor muestra jamás recogida de la superficie de un asteroide atravesó la atmósfera terrestre este domingo y cayó en paracaídas en el desierto de Utah, entregando el espécimen celeste a los científicos.
Dichas muestras, recogidas del asteroide Bennu, tienen el potencial de arrojar luz sobre cuestiones fundamentales sobre la vida y la formación de nuestro sistema solar hace miles de millones de años.
La cápsula que transportaba estas preciadas muestras aterrizó en el desierto de Utah, Estados Unidos, a las 08:52 hora local, marcando el culmen de un viaje de siete años lleno de expectativas y descubrimientos científicos.
Cabe destacar que esta es la primera vez que la NASA, la agencia espacial de EU, consigue traer a la Tierra las muestras de un asteroide. La Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) logró recuperar restos de asteroides en 2020, pero se trató de una cantidad mínima, no mayor que una cucharadita de polvo y rocas.
La misión de la NASA, bautizada como Osiris-Rex, espera haber recolectado 250 gramos de restos del asteroide Bennu, aunque los científicos no lo sabrán con certeza hasta que abran la cápsula dentro de dos días.
Foto NASA
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