Viernes, 29 de Diciembre de 2023 05:28 | Municipios Puebla

Encerrado a piedra y lodo

La estrategia de “abrazos” de AMLO es un fracaso mortal y cuestiona quién se ha beneficiado de la inseguridad y de aplicar la ley a discreción

“No fueron las drogas / fue tu incompetencia”

“Nos están matando / no solo en Salvatierra”

“Si salgo / no quiero que me maten…”.

JÓVENES CANTANDO FUERA DE PALACIO NACIONAL

“Hello

Can you hear me?

Am I getting through to you?

Hello

Is it late there?

Is there laughter on the line?

Are you sure you're there alone?

'Cause I'm

Trying to explain

Something's wrong

You just don't sound the same

Why don't you

Why don't you

Go outside

Go outside.”

BILLIE MYERS

No hipotecan el futuro, lo están matando. Más de 174,000 homicidios en lo que va de este sexenio. De estos, 40 mil jóvenes asesinados tan solo en los tres primeros años; 16 mil de ellos entre los 12 y 29 años de edad (INEGI).

Cifras duras, frías y, detrás de ellas, familias destrozadas y miles de futuros truncados. Esta es la verdadera herencia que dejará López Obrador: México en manos del crimen organizado. La Claudicación del Estado ante el crimen.

Más allá de quien resulte presidenta, hay un hecho incontrovertible: la república está ocupada por el crimen organizado. Los cobros de piso como el que acabamos de atestiguar en el Estado de México; las rentas sobre la producción, como ocurre en Michoacán con los limones y aguacates; las desapariciones forzadas, como la de hace un par de días de 12 personas en Taxco, Guerrero.

Esa violencia que no cesa —no importando el partido que gobierne— muestra un país convulsionado por la inseguridad y muriendo con cada mexicano asesinado. Y la autoridad máxima en el país en los últimos cinco años no ha sido Peña Nieto (menos aún Calderón)…

López Obrador se ufana en decir que ya no hay masacres, mas tan solo en este año se perpetraron 427 (ahora que, si se considera una masacre como el asesinato de tres o más víctimas en un solo hecho violento, la organización Causa en Común contabiliza 2,130 en los últimos tres años). No olvidar tampoco que a los 174,000 asesinados se le deben sumar 97 mil desaparecidos. ¿Cuál es mi punto? Que las masacres son muestra —una más— de la ocupación territorial por parte del crimen organizado; son, después de todo, un instrumento para amedrentar a la población y “marcar” territorio.

Violencia y ocupación que, por cierto, impactará en las elecciones del próximo año. En los últimos cinco años se han registrado 1,564 ataques, asesinatos, atentados y amenazas contra personas asociadas en el ámbito político o gubernamental; de estos, 529 se han realizado en el presente año. ¿Las víctimas? De todos los colores e institutos políticos; la delincuencia no hace distingos.

Al cerrar este año, las masacres de Salvatierra, Celaya, Tabasco nos indican el poder que ha adquirido el CO, pero también —lo que es todavía más preocupante— la banalización que hace la 4t de este mal. O peor aún: una a una cada atrocidad, el presidente ha revictimizado a la población mexicana al tachar a los asesinados de ser drogadictos. El desprecio de López Obrador es absoluto cuando se burla de los jóvenes al culparlos de haber sido asesinados. Ese es el tamaño de su irresponsabilidad y de su nula empatía.

La violencia es tal que ya llegó a Tabasco, estado que lo vio nacer. El viernes 22, la tierra del edén vivió disturbios; abarcaron desde los penales estatales hasta una balacera en un fraccionamiento de Villahermosa (quema de autos incluida). López Obrador dijo: “afortunadamente no pasó a mayores” y reprochó a la prensa por la difusión de los hechos. Mientras, su equipo se limitó a decir se había tratado de un pleito entre particulares…

López Obrador menciona como un logro que en un domingo (el 24 de diciembre) “solo” fueran asesinadas 65 personas… De ese tamaño la inseguridad.

Desde Palacio Nacional, AMLO clama por el cese al fuego en la región de Gaza. Lástima que México se parezca cada día más a una fosa. Su estrategia de “abrazos”, la que Claudia Sheinbaum pretende continuar, es un fracaso mortal. ¿Quién se ha beneficiado de la inseguridad?, ¿de aplicar la ley a discreción?

López Obrador podrá tener otros datos y con ellos encerrarse mental y moralmente a piedra y lodo, pero lo cierto es que el país se desangra, muere con su gente.

Si me preguntarán por la herencia de este sexenio, diría que esa atroz realidad es parte importante de su legado.

Giro de la Perinola

“Lo que te choca, te checa”. Evo Morales cuestionó que Javier Milei esté gobernando por decreto, y consideró que así es cómo “la derecha” administra al Estado. Con el sinfín de decretos que López Obrador ha emitido, ¿debemos considerarlo también de derecha.

Columna de Verónica Malo en SDP Noticias

Foto Cuartoscuro

clh