Atlixco, Pue. Desde los últimos minutos de este martes y durante las primeras horas de hoy miles de atlixquenses son testigos de la caída de ceniza arrojada desde el cráter del Popocatépetl.
Ayer aún no terminaba el día y a pesar de la oscuridad el material alcanzó a observarse merodeando y combinado con el aire para hacer más pesado a este último.
Sin embargo, al llegar el sol de este miércoles quedó en evidencia el color gris de la ciudad. La ceniza estaba en las banquetas y sobre todo en los automóviles.
A pesar de esta situación, los miles de habitantes de este municipio realizan sus actividades de manera normal. Entre otras ir a trabajar y a la escuela.
Las autoridades locales lanzaron desde el pasado lunes una serie de recomendaciones como el usar cubrebocas y realizar en menor medida actividades al aire libre.
Foto: Lena Velázquez
cdch