El tifón Shanshan, clasificado como “extremadamente fuerte”, tocó tierra en la mañana de este jueves en Satsumasendai, una ciudad de Kagoshima, al suroeste de Japón.
Este potente fenómeno meteorológico ha dejado un saldo preliminar de tres personas fallecidas y al menos tres desaparecidas.
Shanshan llegó a las 8:00 horas a la costa sur de Satsumasendai, según reportes de la agencia meteorológica japonesa.
La llegada del tifón obligó a las autoridades a emitir órdenes de evacuación y mantener una alerta máxima en la región. Las advertencias incluían la posibilidad de tormentas intensas, mareas elevadas y olas peligrosas.
El impacto del tifón ha sido severo: miles de residentes se han quedado sin electricidad, y las inundaciones han afectado gravemente la infraestructura local.
Además, se han cancelado cientos de vuelos y se ha interrumpido la producción en grandes empresas, como Toyota, que han tomado medidas para proteger sus instalaciones.