La Torre Hertz, situada en Lake Charles, fue demolida mediante explosiones controladas después de permanecer desocupada durante casi cuatro años debido a los estragos causados por varios huracanes.
Este icónico rascacielos resultó dañado tras los devastadores huracanes que golpearon el suroeste de Luisiana en 2020; el edificio se convirtió en una estructura deteriorada, con ventanas rotas y cubierto con lonas desgarradas.
La empresa propietaria, Hertz Investment Group, con sede en Los Ángeles, había prometido restaurar el edificio una vez que resolviera sus disputas legales.
La demolición fue costeada con 7 millones de dólares, aunque no se ha decidido el futuro del sitio, según las autoridades locales.
El alcalde Nic Hunter describió el evento como “agridulce”, reconociendo los esfuerzos fallidos por salvar el edificio y expresando que ya era hora de cerrar ese capítulo.
La demolición del edificio fue captada en video y compartida en redes sociales, dejando imágenes impactantes.