Matamoros, Tam. - El pasado 10 de octubre, un adulto mayor de 78 años, que respondía al nombre de Lázaro Torres Marín, perdió la vida mientras esperaba a su esposa en el Centro Integrador de Desarrollo, ubicado en la avenida Rigo Tovar en Matamoros, Tamaulipas.
El abuelito se encontraba allí para acompañar a su pareja en el proceso de inscripción al Programa de Pensión para Mujeres del Bienestar, cuando sufrió un infarto fulminante que le costó la vida.
Testigos relatan que Lázaro empezó a sentirse mal y, tras intentar sentarse en la banqueta, se desvaneció sin poder resistir.
Su fallecimiento ha generado una ola de tristeza y reflexión en las redes sociales, donde se critica la falta de infraestructura y atención para las personas mayores que deben someterse a largos tiempos de espera bajo el sol.
Los reportes de Protección Civil indican que el cuerpo fue cubierto con una sábana azul mientras se esperaba la llegada de la Fiscalía General de Justicia y el Servicio Médico Forense (Semefo).
Esta tragedia pone de manifiesto la necesidad urgente de replantear las condiciones en que se realizan estos trámites. Usuarios en redes han exigido a las autoridades implementar medidas que protejan la salud de los adultos mayores, como la instalación de toldos o la provisión de agua potable en estos espacios.
No es la primera vez que se denuncia el riesgo al que se enfrentan muchas personas de la tercera edad en estas circunstancias, donde la falta de sombra e hidratación puede tener consecuencias fatales.
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Foto cortesía
xmh