Autoridades del gobierno de Veracruz dieron a conocer que seis camiones de carga y tres vehículos quedaron enterrados bajo toneladas de tierra y rocas que cayeron durante el deslave ocurrido el pasado viernes en la autopista 150 D Orizaba-Puebla, a la altura del kilómetro 231, cerca del mirador de Maltrata, Veracruz.
Las brigadas de trabajadores de Caminos y Puentes Federales han sido las que han localizado estos vehículos sepultados.
A pesar de que esta catástrofe ha generado varios inconvenientes al tener que utilizar rutas alternativas, como retrasos, inseguridad e incluso el colapso del tráfico en ciertos tramos, el gobernador Cuitláhuac García se ha negado a comentar el tema con la prensa.
Las autoridades todavía no han confirmado si hay víctimas fatales, lo cual ha suscitado críticas de personas que han informado sobre la desaparición de familiares, quienes creen que podrían haber estado transitando por el área en el momento del accidente.
“No quieren que hablemos con los medios; nos dicen que se está acelerando la labor para determinar qué pasó y si hay víctimas entre los escombros. Pero lo que vemos es lentitud, y si alguna vez tuvimos esperanzas, ahora ya no, porque han pasado seis días”, expresó una familia que prefirió permanecer en el anonimato debido a las advertencias que ha recibido.
Capufe ha declarado este incidente como una emergencia técnica y estima que las labores de recuperación podrían extenderse hasta cinco meses. Señalan que lo accidentado del terreno y las condiciones climáticas de la región montañosa complican las tareas de los operadores y la maquinaria.
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Foto: Especial
cdch