Puebla. - La mañana de este miércoles, dos accidentes carreteros en la autopista Puebla-Orizaba dejaron consecuencias graves tanto en la circulación como en la seguridad pública.
La serie de incidentes, que comenzó con la volcadura de un tractocamión, se vio seguida por un choque entre dos tráileres, lo que ocasionó no solo caos en las vías, sino también actos de rapiña que sorprendieron a las autoridades.
El primer accidente ocurrió a primeras horas de la mañana, cuando un tractocamión que transportaba carga refrigerada volcó en el kilómetro 248, en los límites entre Veracruz y Puebla.
Según reportes preliminares, el conductor perdió el control de la unidad, lo que provocó que el remolque se desprendiera y quedara fuera de la carretera. A pesar de la magnitud del accidente, el operador resultó ileso, pero la carga que transportaba quedó esparcida por la vía, lo que rápidamente atrajo a una multitud.
En cuestión de minutos, decenas de personas, incluidos niños, se acercaron al lugar del siniestro y comenzaron a saquear la mercancía. Con carretillas, cubetas, e incluso a mano, se llevaron todo lo que pudieron, mientras algunos de los presentes grababan la escena.
A pesar de que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública llegaron al lugar para abanderar la zona, fueron rápidamente superados por la multitud, que siguió con el robo sin que ninguna autoridad pudiera hacer frente a la situación.
El operativo de seguridad se intensificó cuando la Guardia Nacional División Carreteras asumió el control del incidente, ordenando el retiro de la unidad volcada a un corralón mientras se realizaban las diligencias correspondientes para deslindar responsabilidades.
No se reportaron personas lesionadas, pero los daños materiales fueron considerables, además de la pérdida de la carga robada.
Horas después, alrededor de las 13:00 horas, otro accidente complicó aún más la situación en la autopista. A la altura del kilómetro 223, dos tráileres colisionaron. El accidente ocurrió cuando una pipa, por razones aún desconocidas, impactó con otra unidad pesada que transportaba material reciclado.
El choque provocó un incendio en una de las pipas, lo que obligó a las autoridades a cerrar la circulación en ambos sentidos para garantizar la seguridad de los automovilistas.
La autopista fue cerrada completamente desde la plaza de cobro de Esperanza hasta el tramo Acatzingo-Ciudad Mendoza, y se desconoce el número exacto de personas lesionadas o si hubo víctimas mortales. El siniestro también afectó el flujo de tráfico hacia Veracruz, lo que generó un gran caos en las vías alternas.
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Foto cortesía
xmh