Gritan asesino al gobernador de Puebla en eventos públicos

"Asesino" le gritan al gobernador Rafael Moreno Valle Rosas en eventos públicos del interior del estado, por la muerte del menor José Luis Tlehuatle Tamayo, ocurrida tras el enfrentamiento entre policías estatales y pobladores de juntas auxiliares sobre la autopista Puebla-Atlixco, registrado del pasado 9 de julio.

Gritan asesino al gobernador de Puebla en eventos públicosLlaman asesino a Moreno Valle en coronación de Reina del HuipilLa protesta más reciente de este tipo ocurrió esta semana durante un visita que realizó al municipio de Atlixco, donde una jóven se coló al evento y justo antes de que el mandatario bajara a tomarse la foto con beneficiarios de programas gubernamentales, le gritó "asesino" mientras mostraba una pancarta con la leyenda: "Autor intelectual del caso Chalchi #justicia #MorenoBala”.

Del otro lado de la pancarta, la joven apuntó otro mensaje relacionado con el caso Ayotzinapa: "¡No quiero otro Ayotzina! ¡Puebla Libre!"

Las imágenes fueron difundidas a través de redes sociales por la cuenta de la revista "Región Atlixco" que se distribuye semanalmente en municipios de la zona.

A decir de La Jornada de Oriente la muje fue identificada como Yanet García, estudiante de Ciencias de la Comunicación de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) en el campus de Atlixco.

La protesta anterior ocurrió en el municipio de Teziutlán, el pasado 12 de septiembre donde un grupo de 20 personas se manifestaron en contra del mandatario y con pancartas y consignas lo responsabilizaron de la muerte del menor de Chalchihuapan.

Antes, el 5 de octubre, durante el evento de la coronación de la Reyna del Hupil en Cuetzalan, un poblador se levantó entre la multitud y también le gritó "asesino" en tres ocasiones, cuando el gobernador hacía uso de la palabra.

Esta misma semana, Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acusó que durante las investigaciones del caso, recibió presiones para que creyera en la teoría de que el niño habìa sido herido con un cohetón lanzado por los pobladores; sin embargo, el peritaje confirmó que la lesión fue causada con un cilindro de gas  lanzado por un policía estatal.

“Después de investigar debidamente este asunto logramos demostrar que esto era una gran mentira, una farsa, una versión oficial que se había construido para hacer parecer los hechos de una manera distinta a como acontecieron”, aclarò el ombudsman.

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