Las fuerzas estadounidenses defenderían a Taiwán en caso de una invasión china, anunció el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en su más clara declaración sobre el tema hasta el momento.
El domingo, Biden fue entrevistado en el programa "60 Minutes", de CBS, donde la preguntaron sobre si las fuerzas estadounidenses defenderían la isla gobernada democráticamente y reclamada por China, a lo que respondió:
“Sí, si hubiera efectivamente un ataque sin precedentes".
Biden aclaró que soldados estadounidenses -hombres y mujeres de Estados Unidos- defenderían a Taiwán en caso de una invasión china.
Estados Unidos mantiene desde hace tiempo una política de "ambigüedad estratégica" y no deja claro si respondería militarmente a un ataque a Taiwán.
Su declaración fue más clara que las anteriores sobre el compromiso de las tropas estadounidenses para defender la isla.
Un portavoz de la Casa Blanca dijo que la política estadounidense hacia Taiwán no había cambiado.
"El presidente ha dicho esto antes, incluso en Tokio a principios de este año. También dejó claro entonces que nuestra política hacia Taiwán no ha cambiado. Eso sigue siendo cierto", dijo el portavoz.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Taiwán expresó su agradecimiento a Biden por su reafirmación del "sólido compromiso de seguridad del Gobierno estadunidense con Taiwán".
Un comunicado de prensa afirma que Taiwán continuará fortaleciendo sus capacidades de autodefensa y profundizando la estrecha asociación de seguridad con Estados Unidos.
En este momento el presidente se encuentra en Reino Unido para asistir al funeral de la reina Isabel II.
En mayo, se le preguntó a Biden si estaba dispuesto a involucrarse militarmente para defender a Taiwán y respondió:
Sí, (...) ese es el compromiso que asumimos".
Biden reiteró que Estados Unidos seguía comprometido con una política de "una sola China" en la que Washington reconoce oficialmente a Pekín y no a Taipéi y descartó que Washington fomente la independencia de Taiwán, esto en la entrevista de "60 Minutes".
"No nos estamos moviendo, no estamos alentando su independencia, (...) esa es su decisión", aseguró el presidente de EEUU.
Probablemente estas declaraciones enfurezcan a Pekín, que se enfadó en agosto por la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi.
La visita hizo que China realizara los mayores ejercicios militares de su historia en torno a Taiwán y Pekín ha protestado por los movimientos de los parlamentarios estadunidenses para avanzar en la legislación que aumentaría el apoyo militar de Estados Unidos a Taiwán.
El presidente chino, Xi Jinping, ha prometido poner a Taiwán bajo el control de Pekín y no ha descartado el uso de la fuerza.
Taiwán se opone firmemente a las reivindicaciones de soberanía de China.
La embajada de China en Washington no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
En una llamada telefónica con Biden en julio, Xi advirtió sobre Taiwán, diciendo que "los que juegan con fuego perecerán con él".
Cuando se le preguntó el pasado octubre si Estados Unidos saldría en defensa de Taiwán, al que Estados Unidos está obligado por ley a proporcionar los medios para defenderse, Biden dijo: "Sí, tenemos el compromiso de hacerlo".
En ese momento, un portavoz de la Casa Blanca también dijo que Biden no estaba anunciando ningún cambio en la política estadunidense.
Bonnie Glaser, experta en Asia del German Marshall Fund de Estados Unidos, dijo que si Biden hacía tales promesas debía asegurarse que podía respaldarlas.
"Si el presidente Biden planea defender a Taiwán, entonces debería asegurarse de que el ejército estadunidense tiene la capacidad de hacerlo", opinó.
"Es poco probable que un apoyo retórico que no esté respaldado por capacidades reales refuerce la disuasión", concluyó Glaser.
Foto: El País
LSM
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