La Organización de las Naciones Unidas (ONU) hizo un llamado este viernes a los países, especialmente a Estados Unidos, para que adopten políticas migratorias basadas en los derechos humanos, a raíz de las recientes órdenes ejecutivas firmadas por el presidente Donald Trump. Las medidas, que incluyen la suspensión total de admisiones de refugiados y la eliminación de programas de asilo para personas de Centroamérica y Sudamérica, han desatado preocupaciones sobre el respeto a los derechos fundamentales de los migrantes.
Ravina Shamdasani, portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, destacó que el derecho a solicitar asilo es un principio universalmente reconocido y un derecho humano que debe ser protegido sin importar las decisiones políticas internas de los países. Aunque reconoció que los estados tienen soberanía sobre sus fronteras, enfatizó que las decisiones migratorias deben alinearse con las obligaciones internacionales.
Las nuevas políticas de inmigración fueron anunciadas en el primer día del segundo mandato de Trump, quien, además, declaró una emergencia nacional en la frontera sur de Estados Unidos, buscando frenar la migración irregular. Durante su discurso, Trump prometió que las medidas afectarán a “millones y millones” de migrantes, y también confirmó la suspensión de un programa que permitía el asilo a personas provenientes de regímenes autoritarios de Centroamérica y Sudamérica. Esto ha provocado que miles de migrantes queden atrapados en el lado mexicano de la frontera, sin poder acceder a sus trámites de asilo en Estados Unidos.
El gobierno estadounidense también suspendió de manera inmediata todas las admisiones de refugiados, dejando a muchos migrantes con planes de viajar a este país en un estado de incertidumbre, ya que los viajes previstos fueron cancelados de forma repentina. Según documentos filtrados del Departamento de Estado, los afectados por esta medida estaban a punto de ser reasentados en territorio estadounidense.
Ante este panorama, Shamdasani insistió en la necesidad de garantizar que cada caso sea evaluado individualmente, sin recurrir a expulsiones colectivas o detenciones arbitrarias, algo que subraya la importancia de las vías legales y seguras para quienes buscan refugio. La portavoz subrayó que la ONU continúa instando a los gobiernos a adoptar un enfoque migratorio humanitario, donde los derechos de los migrantes sean siempre una prioridad.
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