En el desayuno de fin de año del 2021 del Presidente Municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, con directivos de medios de comunicación, no hubo el menor atisbo, señal o pronunciamiento respecto a la sucesión gubernamental del 2024.
Ni él, ni los periodistas, pusieron el tema en la mesa decembrina.
Pero, -10 meses después-, durante el Primer Informe de Labores del alcalde, pasado mes de octubre, el escenario político-electoral dio un vuelco de 360 grados.
En el Centro de Convenciones “William Yenkins” y ante la presencia del gobernador Miguel Barbosa Huerta, Rivera Pérez soltó:
“Un político debe estar preparado para los retos por venir”.
“Y yo soy un hombre de lucha, que siempre está listo para afrontar las batallas que vengan”.
“Dios y el tiempo abrirán el camino y los ciudadanos siempre tendrán la última palabra”.
“Para quienes me preguntan acerca del futuro, les digo que los tiempos y las circunstancias cambian constantemente. Y las luchas también.
“Hoy en Puebla vemos un rumbo claro y un futuro prometedor.
-Porque- “nada ni nadie detendrá mi espíritu de seguir trabajando y dando mi vida por el bien de Puebla”.
Barbosa Huerta respondió:
“Lalo camina en su ruta y yo en la mía.
“Debo reconocerlo, Eduardo es un político destacado, lúcido e inteligente.
“Tenemos una coordinación estrecha, Capital y Gobierno”.
Y entrelíneas dibujó el mañana del 2024 y sin decirlo plasmó la importancia electoral de la ciudad:
Puebla Capital y zona conurbada concentran 3.5 millones de habitantes –de los 6
millones que tiene el Estado- y solamente en coordinación resolveremos los problemas, de lo contrario no se resolverán.
El mandatario recordó que “Lalo y él son amigos desde hace 20 años”. Fueron diputados federales en la 58 Legislatura en el 2000 –corría primer trienio del sexenio de Vicente Fox-
En el segundo desayuno decembrino —ayer- de Eduardo Rivera, su esposa Liliana
Ortiz y su equipo de funcionarios, con dueños, directores y columnistas, la temática
de la sucesión gubernamental SÍ estuvo presente.
Y tan estuvo, que el director de Comunicación Social, Fernando Cortés, al dar la
bienvenida, entre broma y broma, pero con trasfondo político, comentó “es el
desayuno del destape”.
Para, entre risas, dar paso al mensaje del edil, quien arropándose con el cuestionamiento de los periodistas, inquirió: ¿Qué va a pasar en el 2024?
Primero, “pedirle a Dios que tengamos salud”.
Después, “que guíe nuestro camino”.
Además, demandar a la sociedad, como a ustedes, medios de comunicación, que marquen el camino a seguir en 2023 -y 2024-
Porque si de algo estoy seguro… “no le saco a los retos”.
Y la responsabilidad que antepongo, y asumo, en cada una de las funciones que he desempeñado, y desempeño. Siempre me guía la responsabilidad.
“Jamás he tenido egoísmos en mi accionar político-administrativo”.
“He trabajado y trabajaré para lograr lo que más le convenga a Puebla y México”.
Apunte que lleva a recordar el mensaje del pasado 10 de octubre de Rivera Pérez:
“Corregir el rumbo significa creer en ti y creer en nosotros.
“Creer que se puede hacer política de forma distinta.
“Creer que es posible lograr un fin superior por encima de nuestras diferencias”.
No hay duda, la ruta 2024 de Lalo está pavimentada.
Resta esperar si esperará los tiempos electorales desde el Palacio Municipal.
O decide el próximo año pedir licencia para recorrer el interior del Estado.
Sin descartar que opte por buscar la reelección o un escaño en el Senado de la República.
¿O no es así Eduardo Rivera Pérez?
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