Un contrasentido acurre en la Secretaría del Trabajo (ST) del gobierno del estado de Puebla, ya que le dependencia que pugna por la defensa de los derechos laborales, está violando la legalidad que protege a funcionarios y empleados públicos, al desatarse una ola de despidos injustificados que se llevan acabo bajo presiones y amenazas. Se trata de una purga en contra de varios de los colaboradores del extitular de la ST, Gabriel Juan Manuel Biestro Medinilla, quien actualmente es el coordinador de los regidores de Morena en el gobierno de la capital.
Esa “limpieza” la ha iniciado Carlos Alberto Toriz Morales, quien es el encargado de despacho de la ST desde marzo pasado, fecha en que Biestro dejó el gabinete estatal para integrarse a la campaña del entonces candidato a la alcaldía de Puebla, José Chedraui Budib.
Lo que está ocurriendo en la Secretaría del Trabajo se sale de toda lógica o justificación, pues a la actual administración estatal le quedan poco más de seis semanas, lo que no justifica que a estas alturas se esté sustituyendo personal, sobre todo cuando la ST desaparecerá en el siguiente sexenio y se convertirá únicamente en una subsecretaría.
La forma en que ocurren los despidos es de la siguiente manera: al servidor público lo contactan directivos del área de Recursos Humanos de la ST en horarios no laborales, para comunicarles que deben presentar, en un lapso de un par de horas, se renuncia.
Si no lo hacen, los amenazan con proceder a través de los guardias que cuidan las entradas de la dependencia para que no les permitan ingresar y por ende, les advierten que les levantarán actas de abandono de empleo, lo que da pie a que no puedan cobrar una liquidación.
De esa manera, ya se echó a uno de los directores del área Jurídica de la dependencia, sin importar que es una persona de edad avanzada y que padece enfermedades que hacen necesario el contar con la cobertura médica del ISSSTEP.
Se despidió a quien era la asistente personal de Gabriel Biestro, de cuando era el titular del Trabajo.
A la encargada de la Recepción de la ST, que era una trabajadora cercana al ahora regidor y expresidente estatal de Morena.
Y por lo menos, a otras tres o cuatro personas más, que les aplicaron el mismo procedimiento intimidatorio y eran trabajadores identificados con el grupo político de Biestro Medinilla.
Esta situación de abusos laborales en la ST de entrada rompe un acuerdo político que Gabriel Biestro suscribió –en marzo de este año– con el titular del Poder Ejecutivo de que “no se tocaría” a los miembros de su equipo de trabajo, una vez que él se fuera a la campaña electoral del municipio de Puebla.
Aunque los que conocen de la crisis que se vive en la Secretaría del Trabajo descartan que se trate de acciones ordenadas desde la cúpula del gobierno del estado, sino todo parece indicar que se debería a un grave desvarío del titular de la ST, Carlos Alberto Toriz Morales, quien por cierto llegó a la dependencia “de la mano de Gabriel Biestro”.
Con el funcionario ocurren tres situaciones críticas:
Primera: por un lado, ha despedido a trabajadores, pero por el otro lado ha contratado a varias mujeres, que se destacan por su estética que las hacen verse como “modelos de modas”.
Dicen “las malas lenguas”, que estás mujeres tendrían pocos conocimientos de los temas de derecho laboral y se les ha visto muy activas en algunas fiestas privadas de los altos funcionarios de la Secretaría del Trabajo.
Por eso a la oficina del secretario ahora le dicen: “el harén de Toriz”. Bueno, eso es lo que se cuenta en “el radio pasillo de la Secretaría del Trabajo”.
Segunda: que la situación más preocupante es que, desde hace varias semanas, a Carlos Alberto Toriz Morales casi no se le ve en las oficinas de la ST, ubicadas en el Paseo de San Francisco.
Nadie sabe qué pasa con él. Desde hace mucho dejó de recibir a los dirigentes de los sindicatos y centrales obreras, que acuden a la ST a buscar solución a conflictos laborales. Los líderes gremiales son atendidos en una subsecretaría, lo que ha empezado a enojar a los representantes de las agrupaciones de trabajadores.
Lo mismo pasa con los directores de la ST que, desde hace mucho tiempo no cruzan palabras con Carlos Alberto Toriz Morales, por lo cual viven en la incertidumbre de no saber si su labor está debidamente acreditada. Todo lo tienen que consultar con la Dirección Jurídica de la dependencia, pese a que muchos asuntos son ajenos a esa área oficial.
Tercera: el malestar no solamente viene de los trabajadores que están en riesgo de ser despedidos, sino de todo el personal, ya que nadie autoriza permisos de inasistencias que están dentro de los derechos laborales de quienes forman parte de la estructura de la ST.
Carlos Alberto Toriz Morales es un abogado, notario y actuario egresado de la UAP. Inició su incursión en temas laborales en la Federación Revolucionaria de Obreros y Campesinos que dirige René Sánchez Juárez. De ahí brincó a las áreas jurídicas de la Secretaría de Educación Pública y del Colegio de Educación Profesional Técnica del Estado de Puebla.
Cuando Biestro llegó a la ST recibió a un grupo de profesionistas expertos en temas laborales, entre los que iba Carlos Alberto Toriz Morales, por lo cual decidió contratarlo.
Ahora al abogado Toris se le olvidaron los temas de lealtad y congruencia, por lo cual está actuando en contra de quien le dio la oportunidad de tener empleo en los últimos años.
clh
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