La primera gran prueba en materia electoral y de democracia para la administración del gobernador Armenta y para su secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala, ya tiene fecha, el próximo 23 de marzo se llevarán a cabo las elecciones extraordinarias en 4 municipios de la entidad, en donde los comicios del pasado 2 de junio, fueron anulados.
El Instituto Estatal Electoral dio a conocer que, en esta fecha, se deberán de llevar a cabo las nuevas elecciones en cuatro municipios de la entidad, Ayotoxco de Guerrero, Chignahuapan, Venustiano Carranza y Xiutetelco.
Chignahuapan y Venustiano Carranza, representan sin lugar a dudas la mayor complejidad, para la nueva administración, sin dejar a un lado la organización de los comicios en las otras dos demarcaciones, las cuales también tienen su complejidad.
El municipio de Chignahuapan representa una complejidad muy interesante para la recién iniciada administración armentista, empezando por saber quien va a ser el candidato de Morena a la presidencia municipal de este lugar.
Es una incógnita con qué candidato se la va a querer jugar Morena en este lugar, si va a repetir Juan Rivera Trejo (el diablo) como el abanderado de este instituto político, cabe señalar que la esposa de Juan, Isabel Martínez Peñuñuri, es la cual encargada del área de comunicación social del Morena en Puebla. Esto podría jugar a favor o en contra del “diablo”.
También lo interesante será saber si Morena va solo, como lo hizo en el pasado proceso electoral o si lo hará en bloque con el resto de sus aliados, luego de darse cuenta de que este factor influyó para la derrota el 2 de junio, pese a que Claudia Sheinbaum y Alejandro Armenta arrasaron en este proceso.
Se menciona que otro personaje, que podría pelear la postulación, sería el ex presidente municipal, Luis Ángel Carrasco, personaje manchado por el estigma de la corrupción durante su paso por la administración de este lugar, no tenía nada y salió siendo dueño de escuelas y gasolineras.
Otro personaje que quiere es el también ex presidente municipal, Enrique Rivera, quien al igual que Luis Ángel está manchado por el estigma de la corrupción, aunque fue salvado por su amigo, el ex gobernador, Sergio Salomón, quien hasta lo hizo subsecretario de Gobernación. El problema de Rivera es que quiso ser candidato por el partido Verde en el pasado proceso y no pudo.
Otro factor que convierte a Chignahuapan en “foco rojo”, es el tema del huachicoleo, hecho por demás preocupante y que estuvo a la vista, luego del triunfo de Juan Lira, alias “el Moco”, personaje que está inhabilitado para poder participar en la elección, pero que sin duda también será factor en el nuevo proceso que se va a llevar a cabo en marzo.
Fuerza México, el partido que lo postuló y que se había hecho con el triunfo, también será interesante ver a quién envía en la candidatura o si se suma a Morena y al resto de sus aliados. Todo esto debe de analizar Armenta y su nuevo secretario Samuel Aguilar, el cual dicen, es un auténtico conocedor de todo el estado y de sus grupos, ya se verá.
En Venustiano Carranza la victoria le había correspondido al PAN y específicamente a la familia Valencia, los caciques de este lugar, quienes ya se aprestaba para pasarse a las filas de Morena y aun así les anularon la elección.
Será interesante ver cómo se dan las cosas en este lugar, el cual representa un reto para la administración de Alejandro Armenta, pero también para la nueva dirigencia estatal del PAN, que encabezará ya para este momento, Mario Riestra Piña.
Para Riestra y Acción Nacional, estas elecciones extraordinarias también representan un nuevo reto, junto con los plebiscitos a celebrarse en las juntas auxiliares de Puebla capital, entes clave para poder recuperar el gobierno de esta ciudad en el 2027.
Veremos la capacidad de Riestra para tratar de levantar a un alicaído panismo, ante un gobernador como Armenta, que no solo conoce como a nadie la entidad y a sus grupos, sino que también ostenta un poder total y absoluto que ojalá no termine por hacerle daño.
Por supuesto que el panismo está en plena desventaja, porque difícilmente podrá reeditar la alianza de fuerzas políticas, que tuvo en el pasado proceso. Es casi un hecho que el PRI irá solo y el PRD ya no existe, además de que el PSI casi seguro será un nuevo apéndice de Morena en Puebla.
Por estas y muchas razones más, las elecciones extraordinarias que se avecinan, deben de ser observadas y valoradas en su justa dimensión, porque son el primer termómetro para medir a la administración estatal que recientemente inició.
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