La votación de la tarde de martes en la Cámara de Diputados de San Lázaro para retirar el fuero al diputado de Morena, Cuauhtémoc Blanco, permitió confirmar la nomenclatura a la que pertenecen hombres y mujeres, especialmente quienes integran el grupo mayoritario y sus aliados en el Verde y Partido de Trabajo.
Existen algunas sorpresas como la priista Xitlálic Ceja que decidió votar en contra del juicio de procedencia contra quien resultó el peor gobernador de Morelos y que se mantiene en el imaginario como un patán futbolista que fue capaz de humillar a sus adversarios e insultar a los árbitros.
Conviene detenerse en el voto femenino pues una de las acusaciones más serias que pesan sobre este personaje es el de intento de violación en contra de su media hermana Nidia Fabiola, aunque las razones jurídicas tengan que ver más con su paso por Casa de Gobierno Morelos y que de acuerdo con el periodista José Ureña, según publica en su columna Teléfono Rojo, obtuvo impunidad de Andrés Manuel López Obrador el 16 de febrero de 2024... Por el momento.
Veamos: la legisladora Rosario Orozco Caballero, viuda de Miguel Barbosa votó en favor de que Blanco mantenga la inmunidad que provee el fuero como legislador, aunque el manto protector para el caso se haya interpretado a modo, pues en realidad ampara a quien lo ostenta por su actividad como representante del poder Legislativo en México y no ante conductas presumiblemente criminales.
La votación de Orozco Caballero va en desdoro del pensamiento y filosofía de un probado cuadro de la izquierda como su marido, el primer exgobernador que llegó de un movimiento político que luchó en contra de los privilegios, la componenda y la fatuidad. Por ello conviene subrayarlo. De la moral política que presumió en vida no habrá mucho en un lapso corto, según se puede observar.
En la misma lógica habrá que colocar a la diputada Vianey García Romero, ex subsecretaria de Igualdad Sustantiva, dueña de un discurso contra la misoginia y el abuso del hombre contra las féminas y feroz defensora de la Cuarta Transformación… Hasta que llegó a sus manos el proyecto para retirar la inmunidad política a un personaje que exuda todo tipo de excesos.
Maiella Gómez Maldonado y Nadia Navarro son mujeres que se deben analizar al trasluz de la actividad electoral y partidista.
La primera fue dirigente de una entelequia llamada Fuerza x México que en la elección de junio de 2024 le entregó la candidatura a quien se llegó a convertir en factor de riesgo para la estabilidad en la región de Chignahuapan: Juan Lira Maldonado “El Moco”.
En Fuerza x México se les hace candidatos a perfiles impresentables, investigados y evadidos de la ley como es el caso, pero no es el único.
Navarro resultó heredera de otra fachada como Pacto Social de Integración que registró como candidata a la presidencia municipal de Quecholac a Guadalupe Martínez, hija de otro probable delincuente, José Antonio Martínez Fuentes “El Toñín”, a quien se le atribuye el enfrentamiento de mayo de 2017 que dejó como saldo 10 muertos.
En la lista de varones diputados están quienes deben estar: José Antonio Gali López del Verde; Eduardo Castillo, Alejandro Carvajal e Ignacio Mier junior en Morena, productos de ese patriarcado por el que dicen, han luchado quienes la tarde de martes decidieron proteger a un depredador, abusador de mujeres -su ex esposa Natalie Rezende lo exhibió como tal hace una semana- y muy probable benefactor de la corrupción que tanto se combate en la 4T.
@FerMaldonadoMX
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