Puebla, Pue.- El 29 de abril del año pasado, el candidato a la gubernatura por la coalición Juntos Haremos Historia, Luis Miguel Barbosa Huerta, inició su primera campaña por la titularidad del Ejecutivo, este día rendirá protesta como gobernador y se convertirá en el primer mandatario emanado de la izquierda en ocupar el cargo, con el respaldo de un Congreso Local con mayoría de Morena.
Adicional a la marginación que viven miles de poblano, el mandatario de la llamada Cuarta Transformación tiene frente a él un reto mayor, el atender la crisis de inseguridad que enfrenta la entidad en sus diferentes regiones, gobernadas por ediles, que en la mayoría de los casos están en descrédito, al margen del partido político del que emanaron, ante la falta de resultados a casi un año de haber asumido el cargo.
Barbosa Huerta arrancará en la primera parte de su administración con ediles cuestionados incluso por la dirigencia nacional de su partido, luego de que la votación de Morena se desplomara casi medio millón de sufragios entre la elección de 2018 y la 2019. En especial, en la capital y la zona conurbada.
El ex senador trabajará en la capital, con la alcaldesa Claudia Rivera Viveros, cuestionada incluso por los regidores de su partido, ante el presunto subejercicio de al menos mil millones de pesos en su primer año de gobierno y el aumento de la inseguridad en diferentes zonas del municipio de Puebla que concentra más de 1.5 millones de habitantes de la entidad.
El tema de la inseguridad no es privativo de la capital, deberá ser atendido lo mismo en el denominado Triángulo Rojo por el robo de combustibles; en la zona huachicolera de San Martín Texmelucan; en la zona norte por donde pasan ductos de Pemex; en la región de Tehuacán y el Valle de Serdán por el constante robo a trenes y a transporte de carga en carreteras; y en la Mixteca Poblana, por la presencia de grupos delincuencia como Los Rojos que operan en los límites con Morelos.
Así, para atender la realidad de Puebla y generar las modificaciones que llevarán al estado a la denominada Cuarta Transformación, Miguel Barbosa nombró a los primeros 20 hombres de su confianza, quienes estimó, lo ayudarán a mejorar la vida de los poblanos.
A diferencia del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, el nuevo gobernador en Puebla no ofreció ni perdón ni olvido, y con el respaldo de la mayoría de su partido en el Poder Legislativo, las administraciones panistas encabezadas por Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad serán auditadas.
Los poblanos este día observarán que la historia se repite, solo con colores diferentes. Los mandatarios priistas por años no tuvieron contrapeso en el Poder Legislativo. En su llegada al poder, Acción Nacional con Rafael Moreno Valle contó con mayoría en el Congreso Local. Este viernes, Barbosa Huerta asume el cargo con su primera iniciativa aprobada, la nueva Ley de la Administración Pública del Estado, que le permitió crecer la estructura de 12 a 17 secretarías con la venia de la mayoría de los diputados locales.
aj