La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) concluye que en los penales del país se ha incrementado el autogobierno y cogobierno, los cuales violan la buena marcha de los centros, aunque esta situación no implica ingobernabilidad, aclaró Guillermo Andrés Aguirre Aguilar, tercer visitador del organismo nacional.
En entrevista telefónica para este medio informativo, en relación a la nota publicada el pasado 20 de noviembre titulada: "Contradice edil de Tehuacán a CNDH: Cereso no es ingobernable", el representante de Derechos Humanos aclaró que el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria (DNSP) es un instrumento de evaluación que permite examinar la situación que impera en el sistema penitenciario nacional, verificando las condiciones de estancia e internamiento de los procesados y sentenciados, cuyo fin primordial es la observancia del respeto a los derechos humanos.
Por ello, dijo, esta evaluación se ha convertido en un indicador importante que sirve como un instrumento de consulta, tanto para autoridades penitenciarias como para académicos e investigadores interesados en la materia.
"A lo que nosotros nos queremos referir no es tanto a la ingobernabilidad. En los centros se gobierna pero no con la autoridad legalmente constituida para ello, es decir, no -efectivamente- puede no haber ingobernabilidad (sic.), pero también lo que es cierto es que los centros están manejados por alguna participación de grupos de internos, lo que constituye propiamente hablando, el autogobierno".
En este sentido, aclaró que para la CNDH "el autogobierno no significa ingobernabilidad sino un gobierno paralelo y un gobierno ilegítimo, eso es lo que quiero yo que quede muy claro, porque en ningún momento la Comisión Nacional ha mencionado que haya ingobernabilidad, hay autogobiernos y cogobiernos que evidentemente debilitan la estructura de los centros hacia el interior y ponen en situación de riesgo a su población, a los empleados que trabajan en el centro, así como a las personas que los visitan".
En el caso de Tehuacán -precisó- "el año pasado, en el diagnóstico 2011, este centro sacó en este mismo rubro (Condiciones de gobernabilidad), este indicador 6.61 y en este año bajó a 5.07. El año pasado no se detectó presencia de autogobierno en 2011, pero en el 2012 sí se detecta este antecedente".
Aguirre Aguilar abundó que "la visita que hicimos nosotros fue el 23 de abril 2012. Las visitas que hacemos en matera de diagnóstico son como una fotografía, es decir en el momento que vamos, lo que observamos es lo que finalmente se da a conocer y evidentemente, si las condiciones a noviembre de 2013 han cambiando pues lo celebramos, y ya lo daremos a conocer cuando se dé a conocer el diagnóstico 2013; pero sí es importante que en ningún momento aludimos a condiciones que se refieran a que no es gobernable el Cereso, sí se gobierna, no de manera apropiada porque hay que ver que no hay la autoridad legalmente constituida para ello, sino otro tipo de factores que son los que evidente estamos dando a conocer como una preocupación de la Comisión Nacional y que repercute sin duda, en la óptica del respeto de derechos humanos de los internos, en materia de seguridad y dignidad en la estancia".
En este sentido, el tercer visitador de la CNDH afirmó que "el día 25 de abril de 2012 se observó falta de manual de procedimientos para el ingreso, para el traslado de internos, posible uso de la fuerza, solicitar audiencia con las autoridades o presentar quejas; falta de manual de procedimientos para la visita familiar e íntima, la revisión de visitantes y de estancias, así como deficiencias en la difusión de normatividad de los internos".
Se observó -ese día- insuficiente personal de seguridad y custodia, de personal femenino, para cubrir las ausencias, vacaciones e incapacidades".
Con el documento en mano, el defensor recalcó que en el Cereso de Tehuacán "existe control por parte de los internos en seguridad, actividades productivas, educativas y deportivas; servicio de alimentación, limpieza y mantenimiento. Presencia de objetos, sustancias prohibidas e internos que ejercen violencia o control sobre el resto de la población. Indicios de cobros por parte de los custodios por asignación de estancia y plancha para dormir, mantenimiento de los dormitorios, alimentos, servicio médico y visitas".
Así como presencia de cobros por parte de los internos para protección, asignación de estancia y plancha para dormir, mantenimiento de los dormitorios, alimentos, por uso de teléfono, acceso a actividades laborales, educativas y/o deportivas, y no realizar labores de limpieza".
Finalmente dejó en claro que "esto fue el reporte que me dieron o que generaron los visitadores que realizaron la visita ese día que, comento, es una fotografía de la situación que se percibió ese día que estuvimos por ahí y que de ninguna manera por supuesto, estamos señalando ni comentando que es ingobernable".
Argumenta edil de Tehuacán falta de recursos
En la nota previa, que motivó la entrevista con el tercer visitador de la CNDH, el presidente municipal de Tehuacán, Eliseo Lezama Prieto, reconoció que al interior del penal hay necesidades pero señaló que competen subsanarlas a los tres niveles de gobierno.
Justificó que una de las limitantes para la operación del Centro regional es la falta de recursos económicos, toda vez que los demás municipios aledaños incumplen con las aportaciones obligatorias que deben entregar a Tehuacán.
El munícipe expresó que el ayuntamiento a su cargo ha invertido más de 12 millones de pesos anuales para la rehabilitación de sanitarios, área de cocina y dormitorios, así como para proporcionar alimentos.
Afirmó que la sobrepoblación es de alrededor de 200 internos, toda vez que el inmueble tiene espacio para albergar sólo 600 personas, pero en la actualidad atiende a más de 800 presos.
Lezama Prieto explicó que pese a no recibir las aportaciones financieras, Tehuacán no ha dejado sin comer a ningún interno, así como otras acciones necesarias para el cuidado y bienestar de la población penitenciaria.
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