Acusan que APRN actuó como juez y parte en relleno sanitario de Huauchinango

Huauchinango, Pue.- La ilegalidad y las malas decisiones han caracterizado la administración del Área Natural Protegida Cuenca Hidrográfica del Río Necaxa (APRN), en la gestión de su directora Silvia Niembro Roca, quien actuó como “juez y parte” en el caso del nuevo relleno sanitario que se construirá en la junta auxiliar de Nopala en Huauchinango.

Pagará Huauchinango 450 mil pesos mensuales por uso de nuevo relleno sanitarioLa anterior es la apreciación del doctor en ciencias, Víctor Florencio Ramírez Cabrera, quien señaló que esta situación ha sido propiciada por la falta de un programa de manejo por lo que los burócratas encargados de la conservación del área protegida asumen “facultades discrecionales” como la que permitió que aprobaran la construcción y operación de un depósito de basura en un territorio donde no debería haber este tipo de instalaciones.

“En palabras del todavía alcalde de Huauchinango (Omar Martínez Amador) fue la directora del APRN quien indicó el sitio donde se habría de construir. Por separado la directora festejó el hecho. Llaman la atención varias cosas: ¿Por qué la directora de un APRN indica la construcción del relleno dentro del Área cuando la norma lo prohíbe? ¿Por qué si el relleno es un proyecto regional, no observó lo que indica la Ley respecto a una APRN, ni objetó la construcción del relleno sanitario en alguna zona del municipio o en alguno otro sitio adecuado para ello, fuera del polígono de la APRN?”, se preguntó el académico.

Esta situación, continuó, coloca a Niembro Roca como “juez y parte”, en un asunto en el que únicamente tendría que ser “juez” y, de acuerdo con la Ley Orgánica de la Administración Pública, “la primera en estar pendiente en promover la conservación de la zona”.

En contraste el sitio donde estará ubicado el tiradero de basura es un “bosque de niebla” del que Niembro Roca debería promover su conservación, dijo. Esto equivale a que “viéramos al director de la reserva El Vizcaíno, celebrando una mina dentro de su Área Protegida o a que el director de Montes Azules indicara dónde remover selva para enterrar residuos”, ejemplificó.  

Aunque la actuación de la directora de la APRN no ha quedado sólo en la emisión del dictamen técnico o en haber escogido el sitio para la construcción del tiradero de basura, según Ramírez Cabrera, la funcionaria además está promoviendo que se lleven ahí todos los residuos del municipio de Huauchinanago aunque implique pagar una alta cuota, económica y ecológica.

Entonces, agregó el doctor en ciencias, surgen otros cuestionamientos: “¿Por qué la construcción en un bosque de niebla que debe ser protegido? ¿Por qué (Niembro Roca) no evitó el desmantelamiento del sitio de transferencia -construido durante el ayuntamiento 2008-2011- por parte del actual ayuntamiento para así disminuir el monto de los residuos? ¿Conocerá la directora la inestabilidad del camino desde la carretera hacia el terreno del relleno y los riesgos ambientales que provocará el tránsito de los camiones recolectores?”

Ramírez Cabrera indicó que en noviembre de 2012 se presentó un proyecto de programa de manejo (PM) para el APRN que no contemplaba sitio alguno para la construcción de infraestructura urbana de alto impacto en Nopala, como el relleno sanitario, con lo que su construcción estaría en franco incumplimiento de esa norma.

Pero como el PM no fue publicado, “la dirección del APRN propuso un decreto modificatorio, con lo que prolongó la vigencia de sus facultades discrecionales, que permitieron la aceptación del relleno. De otra forma, seguramente hubiera sido rechazado. Pero además viola lo establecido en la NOM-83”.

Lo que llama la atención, precisó, es que “la directora del ANP Cuenca de Necaxa se congratula por la construcción del relleno y sería interesante conocer qué opinará la Agencia de Cooperación Internacional Alemana (GIZ), que ha otorgado recursos para proteger el área sobre la transformación de un bosque de niebla en un depósito de desechos”

Para Ramírez Cabrera hay otras opciones para atender de inmediato el problema del destino final de la basura como promover el reciclaje –que ya se hacía en el trienio pasado aunque de manera deficiente-, y la reducción desde los hogares, gestionar con GIZ la obtención de tecnología para el aprovechamiento adecuado de los residuos.

Pero es importante, apuntó terminar con la omisión y las acciones erradas de la dirección de la APRN y que no se basen “sólo en criterios económicos, que al parecer son los que prevalecen ahora”.

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