Internos de anexo de alcohólicos en Altepexi incendian inmueble y escapan

San Francisco Altepexi, Pue.-Debido a que los golpeaban, encadenaban y dejaban sin comer, además de encontrarse en hacinamiento,  un grupo de personas que se encontraban internadas en un centro de rehabilitación para alcohólicos en el municipio de San Francisco Altepexi,  decidieron incendiarlo para poder escapar.

Por exhorto de gobernador, ambulantes esperan diálogo con autoridad de TehuacánPegan en suelo de Tehuacán calcomanía para la sana distanciaLos hechos se registraron este martes en el anexo que se ubica en las calles Lázaro Cárdenas entre 16 y Vicente Guerrero de este municipio y el cual es señalado de operar de manera clandestina al no contar con los permisos correspondientes para funcionar por parte de la Secretaría de Salud.

Las propias víctimas manifestaron que eran maltratados y encadenados por los encargados de este anexo, además de que como castigo los dejaban varios días sin comer, es por eso que decidieron escapar, haciendo un boquete en la parte trasera del inmueble y también provocando un incendio para alertar a las autoridades.

Ante esta situación acudió la Policía Estatal, así como autoridades municipales y pudieron constatar que en este anexo se encontraban 35 hombres, que iban de los 12 a los 55 años, los cuales mostraban visibles huellas de maltrato, además de que otros aún se encontraban encadenados.

Debido a que el inmueble es propiedad del ex síndico municipal de San Francisco Altepexi, Antonio Palacios Lucero, fue detenido por elementos de la Policía Estatal y puesto a disposición de la autoridad competente para que se deslinden responsabilidades.

En tanto paramédicos de SUMA de Altepexi y Ajalpan acudieron al lugar a valorar a los internos, quienes fueron trasladados a otras instancias para su valoración y otros más quedaron al resguardo de sus familias o de las autoridades.

Trascendió que en este anexo se les cobraba a los familiares de los internos mil 500 pesos por su ingreso para presuntamente contribuir para que dejaran algún tipo de adicción, además de 200 pesos semanales y despensas que tenían que llevar para que comieran.

Foto:  Yomara Pacheco

cdcg

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