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Viernes, 29 de Noviembre de 2024

Cuauhtémoc Cárdenas y cuando lo urgente mata lo importante

Por segunda vez se ha vencido a Cárdenas. Y lo que es lo peor: el Ingeniero se perdió solito
Miércoles, 1 de Febrero de 2023 06:10
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Municipios Puebla

“El verdadero valor no está en vencer y aniquilar a tus enemigos sino en enfrentarte a tus propios miedos y salir fortalecido en la batalla.”

NICHOLAS WELLS

En el país de los otros datos, Cuauhtémoc Cárdenas es un traidor, Carmen Aristegui una conservadora, Alejandro Gertz no inventa delitos, Yasmín Esquivel solo tuvo un error de juventud, Delfina Gómez es una mujer honesta, José María Rioboó es el mejor contratista del mundo, Manuel Bartlett un patriota —y todo un demócrata—, los niños enfermos de cáncer son golpistas y El Chapo Guzmán es “el Señor Joaquín Guzmán”.

Para mí que la brújula moral de López Obrador se encuentra totalmente descompuesta; fundida, y que “la luz” que recibe de la Comisión Federal de Electricidad hace que vea de forma deformada a muchos personajes de la 4T y de la vida nacional.

Quien fue el verdadero adalid de la democracia en el país, el primer candidato de izquierda, ganando las elecciones en el 88 y despojado de su triunfo por el entonces secretario de gobernación Manuel Bartlett, es para López Obrador un adversario. Un personaje que está “del lado equivocado” de la historia.

Bastó el anuncio de que todo indicaba que el Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas formaba parte del “Colectivo por México”, para que desde el Salón de la Tesorería —USANDO recursos públicos del Estado— AMLO lo fulminara con el título de traidor.

López Obrador, quien se cree la expresión misma de la moralidad política, dijo: “estás con el pueblo o con la oligarquía”. Y todo porque Cárdenas osó a participar en un grupo que, si acaso, apenas y esboza una lista de pendientes que se requieren solventar en el país. ¿Contrapeso a la 4T? Obvio no.

En otras palabras, ¿por qué tanto brinco con la visceral —y condenable— reacción del presidente ‘estando el suelo tan parejo’?

Pero, pues, tampoco se requirió de mucha crítica ya que, después del rapapolvo presidencial realizado por partida doble en las mañaneras del viernes y del martes, Cuauhtémoc Cárdenas decidió que siempre no. Que no sería “adversario” de López Obrador. Y después de más de un año de trabajar con ellos, se deslindó de los organizadores con tremendo papelón (bueno, solo una cartita)…

En tanto el “Colectivo por México” se pregunta por otro rumbo del país en tiempos de la Cuarta Transformación, todo indica el Ing. Cuauhtémoc prefirió no poner en riesgo el sueldo y la posición de su hijo.

Más vale que siga cobrando como coordinador de asesores de Presidencia a tener problemas con el régimen (digo, parafraseando a López Obrador cuando critica a los opositores en términos del supuesto único interés de estos por el dinero). Esto es, se aplicaría el mismísimo argumento del porqué del cambio radical de Cuauhtémoc en aras de su querubín.
 

No hay un cañonazo de $$$ que aguante nadie, diría el general Álvaro Obregón, y menos si es mensual y vía la nómina de Presidencia.

Pero por mucho que sea el sueldo del vástago Cárdenas (quien, por cierto, era gobernador de Michoacán cuando Felipe Calderón inició la guerra contra el narco; el primero en aplaudirle, el primero también en solicitar el ejército en las calles), lo cierto es que por muy poco “se vendió” su padre (¿el sí traidor a una causa totalmente democrática?).

Tal vez temió a la jauría de la 4T que se le echaría encima… Irónico: de todas maneras el obradorismo y sus simpatizantes se le fueron a la yugular.

Mientras, en el país de los otros datos, Bartlett —el operador del mayor fraude electoral de la historia de México— ríe. Por segunda vez ha vencido a Cuauhtémoc Cárdenas. Y lo que es lo peor: el Ingeniero se perdió solito.

Todo parece indicar que el ingeniero ha decidido cambiar su legado por uno de la negación y el miedo. “Lo urgente” ha aniquilado a lo importante.

Columna de Verónica Malo en SDP Noticias

Foto Daniel Augusto

clh

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