De micro a grandes negocios, el futuro tiene esencia digital

Cuando pensamos en comercio electrónico es muy común traer a la mente grandes empresas internacionales, pero la realidad es que todo tipo de negocios ya están vendiendo en internet, incluso los más pequeños. Tener un negocio siempre es un reto con desafíos constantes, la incertidumbre, los cambios en los hábitos del consumidor y las limitaciones económicas de los últimos meses definitivamente le suman dificultad.

Como siempre, a ningunear al TriPor qué septiembre, mes patrio iniciaba con el día del Presidente Sin embargo, en lugar de enfocarnos en las problemáticas, es momento de buscar las oportunidades y a los socios que nos ayuden a enfrentar los cambios de manera exitosa. Los negocios con tiendas físicas son los que más se han tenido que reinventar, y esto abarca desde los grandes minoristas hasta las pequeñas tiendas locales.

 Uno de los caminos que les ha ayudado a mantenerse en contacto con sus clientes y a continuar un flujo constante de ventas, han sido los canales digitales. Sin embargo, aún queda camino por recorrer. En el caso de las pymes, las principales barreras que encuentran hacia la digitalización es la falta de conocimiento para desarrollar o mantener un sitio web y aceptar pagos de manera digital. No obstante, el interés existe.

De acuerdo con un estudio reciente realizado por Google, 60 por ciento de los pequeños negocios está interesado en vender a través de un sitio propio para tener un mayor alcance de posibles consumidores, para darle confianza a sus clientes y para ser más profesionales.

Actualmente, las micro, pequeñas y medianas empresas ya venden por internet, solo que la mayoría lo hace de manera informal, muchas de ellas lo hace a través de redes sociales y depósitos bancarios. Ahora solo es necesario dar ese paso hacia formalizar su relación con el e-commerce y eso se logra a través de capacitación.

Existen muchos canales para aprender a dar ese paso, desde los cursos gratuitos que ofrecemos en Google a través de Garage Digital o bien iniciativas especializadas como la que lanzamos hace poco de Crece tus Ventas con Google, en donde nos asociamos con expertos que trabajan en diferentes etapas del proceso de ventas en línea — Tiendanube, Shopify, Cliengo y Mercado Pago — para capacitar a los emprendedores que comienzan a impulsar su negocio en línea, así como para ofrecerles beneficios para iniciar esta nueva etapa.

 Esto no significa que las ventas presenciales vayan a desaparecer. El futuro es omnicanal. Lo que sí significa es que cada vez los consumidores esperan tener mayor interacción digital con los negocios en donde consumen, independientemente de su tamaño.

 El mismo estudio mencionado anteriormente, reflejó que las pymes que están interesadas en el comercio electrónico tienen la expectativa de tener ventas 2.5 veces más altas que aquellas que no lo están. En el caso de las grandes empresas, el internet ya no es algo que se pueda ignorar. De acuerdo con un estudio desarrollado por Euromonitor para Google en 2020, el e-commerce aumentó 50 por ciento en México durante el último año y se estima que crezca hasta 226 por ciento en los próximos cinco años.

Para que los minoristas aprovechen este momento, no se trata de formalizar su canal de ventas, sino de voltear a ver al consumidor y mejorar la experiencia del usuario. Crear una experiencia que se apegue a sus necesidades, que sea cada vez más personalizada y que fluya sin fricciones entre la opción física y en línea es fundamental, porque el mejor canal es aquel que funciona mejor para el consumidor.

Por ello, la visión debe ir más allá de pensar en términos de sitios web versus tiendas físicas, hoy 84 por ciento de los consumidores en México disfrutan comprar tanto online como en tiendas físicas. Nos encontramos en un momento de cambios, pero también es un momento clave en cómo redefinimos nuestros negocios, nuestra interacción con nuestros clientes y nuestra visión. Estamos entrando en una nueva etapa cuyas reglas las están escribiendo los negocios de hoy en conjunto con sus consumidores.

Así como es momento de borrar las fronteras entre físico y digital, también es momento de eliminarlas entre proveedor y cliente, porque al escucharnos entre todos y trabajar en conjunto, el camino se hará más próspero.

Columna de Nicolás Mamboury

Milenio

Foto: Especial

cdch

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