Puebla, Pue. - El proyecto de construcción del Ecoparque Tlalli-Malinche, una de las iniciativas más destacadas del gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, ha sido detenido por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
VIDEO Desaparecerá el INPODE para convertirse en SecretaríaJoven acusado de ladrón se salva de ser linchado en Los Reyes de Juárez En una resolución publicada este 16 de enero en la Gaceta Ecológica, la dependencia federal rechazó la solicitud de la empresa Brudeo Solutions Construcción, encargada de la obra, al determinar que no es necesaria la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).
El Proyecto y sus Controversias
El Ecoparque Tlalli-Malinche, proyectado para desarrollarse en 50 hectáreas cerca de la zona de La Malinche, a solo 4 kilómetros de la junta auxiliar de San Miguel Canoa, había sido un proyecto ambicioso que buscaba impulsar el ecoturismo y la recreación en el área. Con la visión de ofrecer espacios deportivos, áreas administrativas, hoteles y zonas para bioactividades, el parque prometía ser un punto de atracción turística y recreativa en la región.
A lo largo de los últimos meses, el gobernador Armenta Mier había mencionado repetidamente su intención de llevar a cabo este proyecto, incluso proponiendo que fuera el lugar para su primer informe de labores en 2025. Sin embargo, la idea de un parque ecológico no estuvo exenta de dudas y controversias, principalmente relacionadas con su ubicación dentro de una Zona Natural Protegida.
El Rechazo y sus Implicaciones
El 10 de enero de 2025, la Semarnat resolvió que no procedía la Manifestación de Impacto Ambiental solicitada por la empresa encargada. Aunque el proyecto contaba con la intención de implementar energías limpias y manejo adecuado de residuos para reducir su huella ecológica, la dependencia consideró que las obras propuestas podrían alterar negativamente el entorno natural de una zona protegida.
A pesar de que la empresa presentó un plan para rehabilitar las carreteras de acceso y mejorar la infraestructura en las comunidades cercanas, las autoridades ambientales determinaron que los riesgos para la flora y fauna local, así como para los recursos naturales de la región, eran demasiado altos para otorgar los permisos de construcción.
El rechazo a la Manifestación de Impacto Ambiental también hace eco de los temores de grupos ambientalistas, quienes alertaban sobre las posibles consecuencias para la biodiversidad de La Malinche, un parque nacional con una rica biodiversidad, incluido el pino, el encino y especies en peligro como el lince ocelado.
¿Qué Sigue para el Proyecto?
El futuro del Ecoparque Tlalli-Malinche queda en la incertidumbre tras esta resolución de la Semarnat. Para continuar con la obra, la empresa o las autoridades locales deberán reformular el proyecto y ajustar sus planes de acuerdo con las recomendaciones de los expertos y las normativas medioambientales, si es que se pretende continuar con la construcción en el mismo lugar.
Cabe recordar que este proyecto era solo uno de los tres ecoparques que Armenta Mier había planeado para Puebla, junto con los de los parques nacionales Izta-Popo y Citlaltépetl. Si bien los planes para estos otros dos parques no se han visto afectados hasta el momento, la zona natural protegida en La Malinche presenta una dificultad particular que ha resultado en este rechazo.
El hecho de que el gobierno estatal haya priorizado la construcción de estos parques ecológicos como parte de su agenda de desarrollo turístico y ecológico podría generar nuevos cuestionamientos y debate en torno al equilibrio entre el progreso económico y la protección del medio ambiente. El caso del Ecoparque Tlalli-Malinche podría servir como un ejemplo para revisar las políticas de desarrollo en áreas protegidas y replantear los proyectos a futuro.
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Foto cortesía
xmh
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