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Domingo, 5 de Mayo de 2024

Abandono del Mil Amores, hizo de su hija Mary una guerrera

María del Consuelo, a los 8 años de edad empezó a luchar por su vida, la de sus hermanos y ahora, tiene cuatro hijos con doble profesión
Martes, 7 de Marzo de 2023 22:54
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Claudia Lemuz

San Pedro Cholula, Pue.- Han pasado 50 años y María del Consuelo Gaona Cortez aún recuerda con tristeza que llega al llanto, el día que ella, sus siete hermanos y su mamá, dejaron el llamado “Castillo”, habitado por Diego Gaona Ordaz, mejor conocido como “El Mil Amores de Cholula” al sumar en su historial 18 mujeres y tener viviendo de 3 a 4, al mismo tiempo en dicho espacio.

De Toxqui a Angón, la vida de Conchita ha sido de vocación y servicioMás de 8 mil personas participarán en la marcha del 8MTras conocer su historia de vida y de compartir minutos con ella, en los que se preocupó por apapachar e incluso compartir comida, se confirma que hace gala a su nombre: Consuelo.

Debido a que su mamá no podría mantener a los ocho hijos que tuvo con el Mil Amores, unos se fueron con los tíos y a Mary le tocó llegar a la casa de su abuela Eulalia Almonte Medina, quien no la dejó estudiar, pero sí le enseñó a ser una gran comerciante, oficio que le permitió ayudar a su madre, sus hermanos y sacar adelante a cuatro hijos, quienes ahora tienen 29,28, 27 y 25 años de edad, además de que todos han cursado una doble profesión.

A los 13 años, María del Consuelo empezó a vender cemitas de pata y queso blanco con chipotle, frene al negocio de su abuela. A la parte, se esforzó por sacar adelante su primaria en el Centro Escolar Presidente Licenciado Miguel Alemán, en el turno nocturno. Fue a los 17 años de edad que obtuvo su certificado, no por falta de capacidad, sino por todas las responsabilidades familiares que asumió aun cuando era menor de edad.

Incluso, con apenas 19 años de edad, le compró casa a su mamá. Y, a los 22 años, tuvo su primer terreno, con la venta de “Cemitas Mary”, negocio que a la fecha deja ingresos a sus hijos, quienes están a cargos de los negocios familiares, porque María del Consuelo ahora es parte de la administración municipal de San Pedro Cholula y labora en la biblioteca municipal, para cumplir uno de sus sueños, estar en contacto con los libros y donde  los niños la conocen como “Tía Mary”.

Cada año celebro mi cumpleaños porque de niña no supe de fiesta

Pese a la fuerte historia de vida que tiene, la cual está marcada por el abandono, María del Consuelo se mantiene no sólo fuerte, sino positiva. Las huellas del pasado están en su alma, pero le han enseñado a perdonar y seguir adelante.

“De niña no hubo fiestas para mí, ni 15 años. Cuando terminé mi primaria no hubo nadie para mí, ni un ramo de flores, le pedí a una de mis amigas del mercado que me acompañara a recibir mi diploma”, recuerda con los ojos humedecidos.

Tras un espacio para recuperarse, dijo estar agradecida y ser millonaria, por la salud que tiene, y en especial por su actitud. Y sí, su actitud que minutos antes le permitió obsequiar unos dulces a una joven mujer y su hijo que andaban en busca de trabajo. Así como compartir una fruta con quien escribe este texto, porque le preocupó que no hubiera comido aún.

Por amor a sus hijos ha tolerado violencia verbal

La mujer que ayudó a su madre a sacar adelante a otros 11 hijos –adicional a los 8 hijos que tuvo con el Mil Amores, dio a luz a 4 más- y que dio doble carrera a sus cuatro hijos, sabe lo que es ser maltratada por el hombre que juró protegerla el día que unieron sus vidas.

A los 15 años de edad estuvo a punto de casarse. Sin embargo, el asistir a su madre en el nacimiento de una de sus hermanas la impactó a tal grado, que decidió que en ese momento no lo haría.

Fue 13 años más tarde, cuando su actual esposo pidió su mano y se unieron en matrimonio.

Aunque al inicio era un hombre cariñoso, recordó, al paso de los años se transformó y la agredía verbalmente, haciéndola creer que no valía y que no era nadie sin él.

María del Consuela manifestó que todo lo toleró por sus hijos, para evitar que ellos se enfrentaran a la ausencia de un padre, como en su momento a ella le tocó hacerlo.

Sin embargo, pidió a las mujeres no tener miedo y sí, la confianza de que pueden salir adelante. Porque en ocasiones, lo que las paraliza es la falta de recursos económicos, pero siempre podemos, dijo con firmeza la propietaria del tradicional negocio “Marisco y Cemitas Mary”, que se localiza en el mercado municipal y ya cuenta con otra sucursal.

Desde jóvenes me ha gustado la política

Además de comerciante, su carácter y genética le favorecieron para involucrarse desde joven en la política. Aunque en el pasado le hicieron ofertas por su facilidad para movilizar personas, su esposo le impidió aceptar.

Ahora, sus condiciones personales se modificaron y su alegría y servicio ahora están al servicio de los ciudadanos.

Foto Claudia Lemuz

clh

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